Luciana Andión, de Add Value
La Magister Luciana Andión, Directora de Add Value, consultora integral en comunicación e imagen personal y corporativa, creadora del Método D.A.N.C.E.R., estuvo en nuestra ciudad invitada por el Campus Salto de la Universidad Católica en el marco del ciclo “Open lecture”. Con ella dialogó EL PUEBLO, con la expectativa de tener una aproximación a su propuesta.

– ¿Cómo es empoderarse para poder vender su marca personal o de la empresa?
– Se trata de ser marca personal. El empoderamiento te ayuda a formar tu marca de la mejor manera, o sea, todos somos marcas porque como personas nos estamos vendiendo y a su vez dejamos huella con nuestro accionar, por eso se habla de marca. Pero más allá de correr el término marketinero, por decirlo de alguna manera, lo que trabajo es el concepto de empoderamiento, de un desarrollo personal. Es decir, que la persona pueda trabajar un camino que le permita liderarse para poder liderar, porque si primero uno no logra estar bien con uno mismo y ser líder de uno siendo consciente de su estrategia de cómo se mueve en los distintos ámbitos, es muy difícil que eso después traspase para un correcto liderar en lo que sea. Porque se pueden liderar equipos, mi propio emprendimiento o mi actividad como periodista, pero primero necesito estar correctamente alineada a esa estrategia que luego voy a llevar hacia afuera.
– ¿Es decir que antes de ordenar la casa de la empresa o de la marca, primero se debe ordenar uno mismo?
– Exacto. Y para eso trabajo en una metodología que cree y que está registrada, se llama Método D.A.N.C.E.R., que nos da herramientas para lograr ese empoderamiento. La palabra D.A.N.C.E.R. es un acrónico, y va por encontrar nuestro diferencial (D), porque cada día estamos más en un mundo competitivo y hay mucho de lo mismo. Entonces, ¿de qué manera logramos que la persona venga y me elija en el emprendimiento que haga? ¿Cuál es mi diferencial? ¿Dónde pondré el foco, mi fortaleza para decir que voy en busca de tal persona o producto que yo haga? Por eso ese diferencial es fundamental, que estará marcado sobre todo por nuestros talentos y ese plus que cada persona le pueda dar.
La A, es fundamental trabajar y apasionarse. Cuando alguien hace algo apasionado, eso traspasa. Se siente, se percibe, cuando uno ve a alguien contento, feliz por lo que hace, lo disfruta de otra manera. Y para que uno esté apasionado, implica trabajar en el autoconocimiento, en la autoestima y en la autoconfianza. Digo autoconocimiento porque muchas veces la gente se pone máscaras para sus ambientes, sus distintos lugares. De repente en el trabajo soy de una manera, en mi casa soy de otra. A veces es muy difícil sostener los distintos roles. Entonces, si me autoconozco, esta es Luciana acá en el trabajo y en mi vida personal, que es una sola, y tengo mi autoestima que la tengo que trabajar porque todos tenemos altos y bajos, y mi autoconfianza en lo que yo me desarrollo, en lo que sea, sea en mi profesión o en mi emprendimiento, voy a poder transmitir esa pasión por lo que hago.
La N, para poder seguirnos empoderando, recordemos que somos seres sociales, nadie se empoderado solo. Entonces, ¿cómo genero redes? ¿Cómo me vinculo con el otro? ¿Para qué? Para poder fortalecernos, si yo te puedo ayudar a vos a que seas mejor y luego tú me puedes ayudar a mí, ganamos los dos. ¿Cómo logramos entre todos alcanzar oportunidades? Las que justamente no suelen caer del cielo. Uno muchas veces tiene que generarlas, y para eso, tengo que tener un diferencial y tengo que estar apasionada, de esa manera, genero mis redes.
La otra letra importante es la C, que para mí es la base de todo, que es la comunicación. Somos seres comunicacionales holísticamente, es decir que la comunicación es mucho más que enviar un mensaje a un receptor, hay que ver los contextos, hay que ver los ruidos que se generan entre las comunicaciones, ¿y con qué comunico? Yo no comunico solo con mi palabra, comunico primero que nada con mi imagen, o sea, cómo me presento, esa apariencia que genero en el otro. Cada vez necesito menos segundos para observar a alguien y hacerme una historia, que obviamente en el comienzo es ficticia, que luego cuando te voy conociendo veré si ese relato es así o no, pero esa primera impresión cuando entro en contacto con alguien es la base para después seguir queriendo o no charlar. Si yo cuando recién te saludaba generaba en ti algo que me llamaba la atención porque o me parecías arrogante, me generaba esa chispa de que eso no me gusta, muy probablemente la conversación quedaría como cortada porque la querría terminar rápido al no sentirme cómoda en esa circunstancia. Por eso tenemos que cuidar ese primer encuentro para que uno pueda tener una comunicación fluida, después veremos la forma de relacionarnos más adelante. Así que es fundamental esa primera impresión que yo genero en el otro con mi apariencia, con mi lenguaje paraverbal, o sea, cómo me expreso con mi lenguaje corporal, el cuerpo habla mucho, es muy expansivo, si me llevo las cosas por delante, si vivo encorvada o no.
Después, dos cosas que son importantes y que poca gente las considera en comunicación, una es el comportamiento, porque tengo que saber cómo comportarme. Y también esto es generacional, no nos comportamos de igual manera a los contextos. Es decir, una persona que vive en Uruguay no se comporta de igual manera en una cultura china. Poder entender esos contextos, poder entender las edades cuando uno se relaciona y quiere comunicarse con el otro. Y el último, que está tan de moda, que es la comunicación digital, o sea, las redes. Poca gente cuida su comunicación en redes por el impacto que eso genera. Vemos que alguien escribe algo en una red y de pronto se expande y se hace viral sin poder controlarse. O escribís algo y lo malinterpretan. Entonces, poner el foco en cómo me comunico a nivel digital, hoy es fundamental porque mi imagen se puede ver afectada.
Y las últimas dos para una empoderarse, necesita lo que es el aprendizaje continuo, y eso está dado en la enseñanza (E). Eso quiere decir que yo continuamente me pueda estar capacitando, porque el mundo cambia, lo que aprendí ayer ya es obsoleto, siempre están saliendo cosas nuevas, siempre están brindando otras miradas a los temas. Hoy tenemos mirada de género, mirada de la sustentabilidad, algo de lo que antes no se hablaba.
Y la última es la R de la resiliencia, que si bien es un tema que últimamente quedó con la pandemia en boga, cuando yo lo trataba, estoy hablando de antes de 2018, todo el mundo me decía, ¿pero resiliencia? Eso solo si te pasa algo trágico, y no. Hoy sabemos que a la resiliencia la llamamos el arte de rehacerse, es decir, la reconversión, que uno pueda reconvertirse, porque hoy nada es fijo. De repente estoy en un trabajo 20 años y un buen día me quedé sin trabajo. Entonces, ¿cómo me reconvierto? ¿Cómo me integro al mundo laboral cuando de repente pasé 20 años en el mismo lugar?
Una vez que trabajo todas esas áreas puedo empezar a empoderarme, porque me van a dar las herramientas para poderme liderar para luego recién liderar a los otros. Ese es el empoderamiento, es sentirse bien con uno mismo manejando una estrategia de cómo me vendo, en el buen sentido, hacia afuera, y ser así percibida de la mejor manera.
– El acrónimo de su método también quiere decir “bailarín”, lo que va de la mano de la necesaria armonía que termina integrándolo todo…
– Exacto, es así, la palabra es dancer que significa bailarín, y va en ese concepto, en la analogía del bailarín, porque siempre digo que la vida es como un continuo baile, nos toca bailar a todos, pero no todos de igual manera porque hay distintos ritmos. Capaz tú encaras un tema de una manera y quizás yo le encare de otra, por mi historial, por mi contexto, etcétera. La vida es eso, nos tiran a una pista de baile y cada uno deberá bailar. Está el gran bailarín porque le gusta bailar y se adapta porque con el ritmo que sea se mueve bien, y está el otro que de repente está más cómodo bailando con un tango o está pasando un momento de melancolía o está feliz y hasta hace trencito. Esa es la vida, poder transitar. La marca es nuestra propia vida.
– Uno podría relacionar esta propuesta con el mundo de los negocios, pero ¿puede ser aplicado en cualquier orden de la vida de la gente?
– Efectivamente, para todo. Por eso digo, primero pasa por un desarrollo personal, por lo que, si no trabajo estos temas, me puede costar caro. Me ha pasado como consultora que me digan que no pueden relacionarse con la gente, que le da vergüenza, que es tímida o la gente la interpreta mal. ¿Cómo es eso? “Si, me ven como una persona seria”. Veamos cuáles son los elementos que estás transmitiendo a los otros que hace que los demás te vean de esa manera. Y de repente pasaba por estar permanentemente encorvada o pasaba por aislarse, porque como no sabía cómo interactuar con los otros prefería quedarse en un rinconcito. Ella misma se iba alejando y generando esa coraza que la separaba del resto. Cuando logró potenciar esas áreas que más dificultad tenía y trabajar su imagen, las cosas le comenzaron a fluir de otra forma, porque no le era algo pesado, ya lo vivía de otra manera, no como una carga de llegar a decir “todo me pasa a mí”, como entrando en una negatividad, sino todo lo contrario.