Qué país generoso”, suelen decir algunos, con ironía, claro.
Otros en cambio dicen: “Esto es un paraíso, país corrupto es la Argentina o esos otros por ahí…”. Y así uno escucha a diario miles de opiniones… Pero seamos sinceros: pasan cosas muy “extrañas” también en este querido Uruguay, ¿verdad?

Lo increíble, y hasta divertido podría ser (si no fueran cosas muy importanes), es cómo en este país la izquierda y la derecha (¿puede trazarse una línea divisoria entre abstracciones?) se critican mutuamente lo que ellos mismos hacen, y si lo hace aquel está mal y hay que poco menos que destruirlo, pero si lo hace este, que es uno de este lado, hay que justificarlo.
Si habremos hablado de estas cosas en esta misma columna…
Pero cada semana aparece nuevo material que alimenta el tema.
Hace unos días leíamos unas líneas que escribió el profesor Daniel Dalmao -hombre de referencia en el Frente Amplio-, en una red social, que dicen: “Jefe de seguridad del presidente procesado por integrar banda de los pasaportes falsos, pasaporte otorgado a un narco, ministro turismo investigado en la justicia, respaldo al intendente que cambiaba pasantías por sexo, jefe de policía procesado por contrabando y otras, decreto para hacerle mandados a empresa tabacalera, etc, etc.
Por muchísimo menos que esto, a Sendic lo «lincharon» en los medios y lo hicieron renunciar a la vicepresidencia.
Pero a este muchacho, presidente, «ni lo toca» como dicen nuestros jóvenes”.
En primer lugar, es curioso que sea un frenteamplista quien traiga el nombrre de Sendic, cuando lo común es que desde esa fuerza se critique que “siempre la derecha está hablando de Sendic”. Pero más allá de eso, creemos que en parte tiene razón lo que dice Dalmao. Esto del jefe de la custodia de Lacalle, por ejemplo, es una barbaridad, es de esas cosas que no podrían suceder de ninguna manera.
Pero no por eso podemos (como se deja ver entrelíneas en el párrafo citado) defender a Sendic.
Al mismo tiempo aparece una publicación que hace el diputado salteño (pero electo por Montevideo) Felipe Carballo, donde dice que lo sucedido con el custodia del Presidente es “un episodio de alta corrupción” y agrega que “acá estamos hablando de una asociación para delinquir”.
Entonces sucede que de pronto uno no entiende nada: Carballo, que era (¿o sigue siendo?) “carne y uña” con Sendic, ¿ahora critica esto, ahora habla de corrupción…? ¿Tan desmemoriados somos?
Es decir, los mismos que hoy se indignan con algunas cosas, las defendieron antes y hasta las siguen defendiendo si fueron otros que las hicieron.
¿Y la coherencia dónde queda? ¿Y la intención de que primero hay que luchar por el país antes que por el partido tal o cual dónde queda? Y de todos los colores políticos estamos hablando.
Porque es cierto también que muchos en su momento “se subieron al carro” para bajar a Sendic cuando pintaba como una promesa de futuro, pero que “metió la pata”, no se puede dudar, y “la mano en la lata” también, pero no lo decimos nosotros, lo dijo la Justicia.
Pero vea usted, estimado lector, esto otro del custodia de Lacalle Pou. Como ya dijimos, es un disparate que no debería pasar, y que un Presidente encima diga: “Yo no sabía”, cuando el hombre tenía más de 20 anotaciones policiales, menos. Pero fíjese que los que hoy se indignan con tal situación, son los mismos que hace menos de un año defendían a la diputada Susana Pereyra (viuda de Bonomi), luego de que su custodio fuese imputado por los delitos de “tráfico internacional e interno de armas y receptación”. ¿Ya nos olvidamos de eso? ¿Tan distintas varas usamos los uruguayos para medir las cosas?
Ahora bien, hay una cosa que entendemos se puede destacar en Lacalle, dentro de lo que (lo decimos una vez más) es un disparate…Y es que reconoció el error, asumió la responsabilidad, «uno siempre está sujeto a equivocaciones -dijo-, lo que hay que reducir es el margen de error para equivocarse lo menos posible.
En este caso no afecta a la población, me afecta a mí y a mi familia», dijo. Entonces ordenó la investigación, etc., etc. Aspiramos, todos los uruguayo seguramente, a que esto se aclare y caiga quien tenga que caer.
Pero qué curioso todo… Porque además, el Presidente del Frente Amplio Fernando Pereira, en una especie de conferencia de prensa paralela a la de Lacalle, dijo que los dichos del mandatario no fueron claros ni acertados.
Según Pereira, Lacalle Pou no puede decir que su custodio cumplía bien sus tareas, porque si así fuese no podría estar detenido. ¿Pereira entendió mal o quiso entender mal?, porque Lacalle no dijo eso.
Usted, Pereira, intenta tergiversar las palabras del Presidente, porque Lacalle sólo habló de las tareas que Astesiano cumplía como seguridad ahora, ¿cómo usted dice entonces que si las hiciera bien no podía estar detenido? Había estado detenido antes, por episodios de antes. Pero casualmente, el argumento que más le sorprende a Pereira “ahora” (remarcamos el presente) es el mismo que sostuvo en su momento el matrimonio Bonomi ante una situación de similares características y que el Frente Amplio respaldó. Vamos a recordar…En noviembre del año pasado, un policía de la Guardia Republicana fue arrestado por tráfico de armas.
Según los trascendidos de prensa del momento, fue detenido en un allanamiento, luego de que la Dirección General de Aduanas incautara en el Aeropuerto de Carrasco una encomienda proveniente de Estados Unidos, con armas. Dentro del paquete, detectado en un control de rutina, viajaban también empuñaduras y kits de suplementos para armas.
Tras la detención, se supo que el funcionario se encontraba prestando funciones mediante «pase en comisión», en la oficina del Parlamento de la diputada del Frente Amplio, Susana Pereyra, esposa del exministro y en ese entonces Senador Eduardo Bonomi.
Conocido esto, el matrimonio intentó responsabilizar al gobierno de Lacalle por los hechos.
Susana Pereyra aseguró que “en acuerdo con Larrañaga se resolvió el pase en comisión». Según ella, «eran del equipo que estaban trabajando con nosotros en la seguridad en el ministerio».
Por su parte, el extinto exministro Bonomi indicó que desde el gobierno les «dijeron quiénes iban a ser» y ellos «pidieron los pases en comisión».
La selección del efectivo, dijo el exministro, «la hace la propia Policía».
Qué entrevero, ¿no? Pero de inmediato, en un breve comunicado, el Ministerio del Interior dejó al descubierto las mentiras. «El pedido de pase en comisión fue resuelto por el ex director general de secretaría, ingeniero Federico Lara, el 28 de febrero de 2020 (o sea gobierno anterior), luego de que se solicitara por parte de la diputada Pereyra», decía el comunicado del Ministerio del Interior divulgado en ese momento.
«Esta administración no ha propuesto ningún nombre para que sea solicitado en régimen de pase en comisión, ya que ello es resorte exclusivo de los legisladores que los piden de acuerdo a la normativa vigente», explica.
Entonces, ya sin argumentos, la diputada Pereyra dijo finalmente que el custodio acusado de tráfico de armas tenía “un legajo excelente y cumplió su tarea de manera inobjetable», pero que era «imposible saber qué hacía en su vida privada».
Sin embargo, eso mismo, que en aquel momento el Frente Amplio defendió, hoy en día a su Presidente Pereira le indigna.
Claro que más ejemplos sobran, pero no nos da el espacio…El Pato Celeste realizaba algunas maniobras desde la propia Torre Ejecutiva, por ejemplo.
Y así se podría seguir…
En fin, un país generoso, sin duda