No se necesita ahondar demasiado en lo que pasó, porque la imagen de la incidencia, fue mucho más allá del consumo local. No hubo medio periodístico de Montevideo que no se ocupara del caso, sobre todo por la consecuencia: la internación en lo inmediato de Matías Sabarrós, jugador de Saladero, tras la durísima entrada del futbolista Gonzalo Trindade de Sud América.
La situación se produjo el pasado domingo, cuando Saladero y Sud América se enfrentaron en campo de juego albinegro, en el marco de la segunda fecha del Campeonato Salteño.
El delantero de Saladero (36 años) fue derivado a un centro asistencial, con un alerta declarado: la patada impactó en la zona renal. El órgano pareció comprometido en una primera instancia y a partir de ello, todo el proceso de observación, para ir calibrando los pasos inmediatos.
EL CICLO DE
MEJORAMIENTO
La buena nueva es que en la víspera y tras el informe médico, se enfatiza que «en líneas generales, es la mejor evolución». Se habla desde el profesional tratante que «desde situación de estabilidad, ha evolucionado muy bien. Por supuesto que sigue con dolor, pero de a poquito va aliviando. La orina está más clara. Se está alimentando bien y la función renal mejoró. Todo en líneas de mejoría. Veremos con el urólogo cuando más tiempo deberá permanecer internado. En líneas generales, es la mejor evolución».
La transcripción desde EL PUEBLO, tiende a ser textual, voz mediante de quien aportó el informe señalado. Queda en claro que el ciclo de mejoramiento ha sido concreto, alentador y parece aguardarse la continuidad en ese aspecto.
Tan solo recordar que en un primer momento se manejó la hipótesis de extirpación del órgano afectado. La nueva realidad determina lo contrario, siendo posible que en la jornada de hoy surjan nuevos elementos en pro de la evolución de Matías.
