Montevideo, 27 mar (EFE).- El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, consideró «superada» la etapa de defensa de la Ley de Urgente Consideración (LUC), , sometida este domingo a un referéndum promovido por organizaciones sociales y políticas para derogar 135 de sus 476 artículos.
»Etapa superada. Mañana seguimos con el mismo optimismo y las mismas ganas, con una coalición que ha mostrado firmeza en la adversidad», dijo el mandatario en una rueda de
prensa ofrecida en la Torre Ejecutiva (sede de Gobierno), en la que compareció junto a todo su gabinete, una vez se confirmó la victoria del ‘No’ en la consulta.
Acompañaron al mandatario en la mesa la vicepresidenta, Beatriz Argimón; el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado; y el prosecretario, Rodrigo Ferrés, mientras que todos los ministros, salvo el de Salud Pública, Daniel Salinas, enfermo de covid-19, se situaron de pie tras ellos.
El jefe de Estado uruguayo defendió, una vez más, la ley 19.889, promulgada en julio de 2020, apenas tres meses después del inicio de su mandato (2020-2025), como una norma que «da más derechos, más libertades y más garantías».
Ante los reclamos de «diálogo» por parte de la izquierda, el mandatario reivindicó «el Parlamento como el lugar donde se hace síntesis de las distintas opiniones», al tiempo que dijo que en el Poder Legislativo ya hubo conversaciones que permitieron la modificación de 279 artículos de la LUC antes de su promulgación.
Consultado sobre cómo será el día después de esta consulta, Lacalle Pou dijo que el Ejecutivo continuará trabajando en «temas que son urgentes», como la educación, la reforma de
la Seguridad Social, la mejora en los asentamientos o la necesidad de apertura en el Mercado Común del Sur (Mercosur).
Además, sugirió que en 2023 intentará una rebaja de impuestos para «aflojar la cincha a los uruguayos».