Una bala de cañón ha sido un nuevo hallazgo que pertenece a la historia de los antepasados de nuestra ciudad.
Se trata de un objeto de Arqueología Militar, siendo más precisos de A M marítima. Esta bala de cañón tiene un peso de 15 kilogramos, unas 33 libras.
A simple vista podría tratarse de una bala de cañón terrestre, pero observando un detalle de la misma identificamos que se trata de una bala de cañón marítimo.
El detalle referido es, la soldadura partida que ataba a esta bala a otra a través de una cadena de un metro. Estas balas de artillería naval fueron diseñadas con el propósito de «desarbolar», se denomina así al hecho de arrasar con el mástil y toda la estructura que hace posible la navegación de las embarcaciones enemigas.
Esto ocurrió en Salto a mediados del siglo XIX y el Sello de la Historia compartió con EL PUEBLO dicho hallazgo.
“Agradecemos la gentileza de Anibal y quedamos a las ordenes para que aquellos que tienen objetos arqueológicos y estén interesados en conocer su procedencia y contextualizarlos se comuniquen con nosotros para poder así seguir cumpliendo nuestro propósito, el de investigar, preservar y divulgar sobre nuestro patrimonio” – puntualizó el Prof. José Buslón.
Las balas de artillería naval fueron diseñadas con el propósito de «desarbolar», se denomina así al hecho de arrasar con el mástil y toda la estructura que hace posible la navegación de las embarcaciones enemigas.
La forma de cargar el cañón consiste en hacerlo dejando la cadena en el medio. Una vez producido el disparo y por efecto del mismo la cadena se despliega en toda la extensión , arrasando con todo lo que encuentra a su paso, logrando el objetivo de destrucción. En algunos casos se confeccionan con dos ramales los que aumenta su poder de destrucción aunque puede afectar la precisión del disparo.
Esto descrito es lo que ocurre según las previsiones de un contexto normal de enfrentamiento, pero aveces las cosas no salían como estaban pensadas y por ejemplo se hace necesario bajar los cañones de la embarcación y utilizarlos en tierra. En este caso, surgido de un contingencia, porque tuvieron que abandonar el barco repentinamente o porque la artillería quedó muy disminuida, se utilizaban estos cañones en tierra y también estas municiones , teniendo un efecto desbastador cuando lograba impactar sobre divisiones enemigas.

LOS OBJETOS Y SU CONTEXTO, LA METODOLOGÍA PARA EL ANÁLISIS.
Este proyectil fue encontrado por Don Anibal Dalmao, mientras realizaba trabajos de albañilería.
Escavaba sacando las raíces de arboles que era necesario quitar para luego hacer hormigón y se encontraron con este hallazgo sorprendente o por lo menos no muy frecuente.
Cuando estas cosas ocurren afloran las hipótesis, parte del método científico necesario para realizar una investigación. La primera hipótesis, es que alguien poseía este objeto y lo descartó en su fondo.
Para esto habría que indagar en la familia apelando al relato oral.
La segunda hipótesis surge de tener en cuenta el contexto del hallazgo. En este caso hablamos del contexto histórico y es que fue hallado en proximidad del territorio dónde ocurrió la Batalla de San Antonio en 1846.
Pero con esto, si bien la información es importante, no basta , más aún si se pretende realizar una divulgación científica del hallazgo.¿Existió un ataque de la marina en Salto en esa fecha ?
La respuesta es que no, con lo que descartaría nuestra hipótesis, pero existe un elemento a ser tomado en cuenta y el mismo refiere a que en la zona se encontraron botones regimentales de la Marina inglesa que estaba a la orden de Garibaldi y en croquis que realizaron los soldados que participaron de la batalla, esa bala bien pudo ser disparada desde uno de los lugares que estaba apostada la artillería de Giuseppe y coincidiría en las estimaciones de la distancia que podía alcanzar.
Esto ocurrió en Salto a mediados del siglo XIX y el Sello de la Historia tiene el gusto de compartirlo con ustedes.
Agradecemos la gentileza de Anibal y quedamos a las ordenes para que aquellos que tienen objetos arqueológicos y estén interesados en conocer su procedencia y contextualizarlos se comuniquen con nosotros para poder así seguir cumpliendo nuestro propósito, el de investigar, preservar y divulgar sobre nuestro patrimonio.