El hallazgo de ‘La Joven de Amajac’
“Después de más de 529 años seguimos encontrando vestigios de cultura prehispánica a flor de tierra”.
El 1ro de enero de este año cuando toda la humanidad estaba en medio de la pandemia, en Veracruz – uno de los estados orientales de México – ocurrió un descubrimiento, que no es inusual en México pero que impacta en otros lugares.
Dos campesinos estaban limpiando su terreno para sembrar sandía en una comunidad llamada Álamo Temapache y de pronto, cuando quisieron dar la vuelta a una piedra que estorbaba en el campo, descubrieron una singular escultura con la imagen de una mujer. No se trata de una escultura cualquiera; estamos hablando de una escultura tallada que tiene dos metros de alto y que está hecha de piedra caliza.
“México tiene un arraigo cultural e histórico tan fuerte que ni nosotros mismos podemos entender lo que hay debajo de nuestra tierra… sigue siendo un privilegio tener este tipo de hallazgos que además, no fue hecho por arqueólogos o especialistas sino por dos ciudadanos comunes que de pronto, les apareció una escultura de cientos de años” reflexionó Salomón.

¿Cómo reaccionaron los campesinos?
Muy sorprendidos claro. De inmediato buscaron en internet, para entender lo que habían encontrado y poco a poco fueron llegando a ciertas conclusiones, junto con la ayuda de los arqueólogos del INAH y gente que sabía sobre ésto.
Se concluyó que se trataba de una escultura perteneciente a la Cultura Huasteca. Mucha gente cree que cuando los españoles llegaron a México solamente estaban los Mexicas o lo que se conoce como Aztecas.
En México hubo y hay un montón de culturas, civilizaciones y de pueblos originarios que tenían nombres, costumbres y hábitos distintos; entre ellos, uno de los que se habla muy poco son Los Huastecos, que tenían unas habilidades especiales”.
¿Qué características tenían los Huastecos?
“Hacían tremendas esculturas con imágenes de mujeres; por este tema, les hicieron en la época, una especie de ‘bullying’ de la época. Los que dominaban el territorio y que también dominaban otras culturas, los tachaban de libidinosos y borrachos.
Ellos sí,tomaban alguna bebida alcohólica que fabricaban con fruta fermentada y luego, aparentemente se entregaban a fiestas con frenesí…
De hecho, existe una escultura que se les atribuye a los huastecos llamada ‘La diosa de la lujuria’ que ahora se exhibe en París.
Entonces fíjense, aparece esta escultura y causa una sensación tremenda, no sólo porque es encontrada por campesinos que no sabían lo que habían encontrado.
En el siglo XIX y a principios del XX hubo muchísimo saqueo de arte prehispánico en los barcos extranjeros que venían al puerto de Veracruz. Era muy frecuente que compraran piezas antiguas y muy valiosas por chirolas.
La escultura recién encontrada se le llamó ‘La joven de Amajac, nombre del municipio donde fue encontrada.
Hace poco retiraron la escultura de Cristóbal Colón de la Avenida Reforma de la Ciudad de México, después de muchísimos años.
Hubo varios intentos de sustituir ese monumento, primero se le invitó a un escultor muy conocido a que hiciera una escultura de una mujer femenina y eso volvió a desatar la polémica.
Luego, el movimiento feminista – como estaba vacío lugar – puso otra escultura hecha por ellas que le llamaron ‘Monumenta’.
Finalmente, el Consejo Consultivo de la Ciudad de México decidió que la mejor opción era colocar la escultura de ‘La joven de Amajac’ que fue encontrada por César Cabrera y Alejandro Céspedes”.
¿Qué mensaje transmite la escultura?
“Suponemos que para cada uno transmite un mensaje distinto. Para las autoridades de la Ciudad, la escultura simboliza la resistencia en contra de los conquistadores… y desde luego la fuerza liberadora de la mujer y la fertilidad. Lo cierto es que se aprovechó el momento de regocijo por haber encontrado la pieza. La Ciudad de México hará una reproducción de esa escultura ya que la original fue derivada al Museo Nacional de Antropología.
Es notable que después de tantos años seguimos encontrando vestigios de las antiguas culturas a flor de tierra y quién sabe todo lo que falta por descubrir.
De hecho si nos internamos en la selva de Yucatán, hay todavía ciudades ocultas que no han sido desmontadas o descubiertas.
Se tienen estudios serios sobre ciudades antiguas que siguen dentro de la selva sin que hayan sido vistas por el hombre moderno”.