-La Divisional «B» cortó de cuajo con la liguilla como opción para esta temporada 2023. El proyecto expuesto por Parque Solari fue avalado por la mayoría de clubes, a excepción de dos. Concreto es que el aspecto económico, barre literalmente con la cuestión deportiva. «Es penoso que los clubes de la «B» y de la «C» no puedan jugar en el Dickinson», al decir de Deolindo Miquelarena a EL PUEBLO.

El presidente de la «B» admite la razón-elocuencia que animó a los clubes, rechazando la liguilla como último escalón en el calendario.
Sucede que los costos tornan inviable que se disputen los partidos finales en el estadio. Red lumínica, funcionarios en boletería, portería, leyes sociales, papelería, guarda policial, etc.
Las últimas experiencias de los clubes de la «B» jugando la liguilla han sido nefastas en materia económica. Sin ir más lejos, lo sucedido en la temporada 2023.
Si en el caso de la «B» la situación se plantea en esos términos, el lector puede sacar las cuentas con respecto de la «C» y el Dickinson como alternativa de escenario.
Es válido preguntarse cuánto tiempo va transcurriendo sin que la menor de las divisionales, pueda jugar fecha o partidos de definición.
El Dickinson, a esos efectos, vedado para los más débiles. El cartel de «no pasar». Ese cartel que gobierna la escena.