omo se informará días pasados, sobre fines de la pasada semana la Intendencia de Salto solicitó a las autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) la suspensión de clases presenciales en Primaria, Secundaria y UTU en todo el departamento. Es lo que se ha hecho ya en Rivera primero, y en Artigas y Fray Bentos después. EL PUEBLO consultó al Dr. Juan Pablo Cesio sobre cuáles son los argumentos que se manejan desde la comuna para tal solicitud. Cabe recordar que Cesio, médico de profesión, está por segundo período consecutivo al frente del área de Salud e Higiene, pero se desempeña además como Coordinador General de la Intendencia.
En primer lugar, a modo de introducción a su respuesta, dijo que hay que tener en cuenta que «prácticamente durante toda la semana (que pasó) Salto tuvo un índice de Harvard en rojo. ¿Qué quiere decir esto? Que en los últimos 7 días hubo más de 25 casos nuevos, es un promedio, porque tuvimos un día donde hubo 98 casos nuevos y otros días menos. Pero esto indica la gravedad de la situación y que estamos en una fase donde ya no solamente hay circulación comunitaria del virus sino que prácticamente es imposible hacer el rastro y el aislamiento de todas las personas que están padeciendo la enfermedad, se pierde el hilo. El propio Grupo Asesor Científico Honorario había adelantado que, de no tomarse algunas medidas más duras, esto se iba a venir. Se está dando el máximo de ingreso al CTI, lo que complica la disponibilidad de camas.
Ese es uno de los cuellos de botella. Y si se siguen los modelos matemáticos, esto tiende a seguir creciendo en los próximos 15 o 20 días».
-Por un lado, se habla de «endurecer medidas», por Yo soy un gran hincha de la libertad responsable.
Pero la historia de las sociedades es la historia de la regulación de los comportamientos. Si no, no tendríamos leyes que regulan nuestro comportamiento. Si todos fuéramos responsables en nuestras libertades no habría sanciones para quienes roba, para quien comete un atraco, para quien mata….
Yo creo en el ser humano como individuo que expresa su libertad, pero la sociedad en su conjunto está y tiene que estar regulada.
-Hablemos específicamente de Salto; ¿qué datos manejan ustedes como para pedir la suspensión de clases?
Nosotros tuvimos entre los siete y catorce días después del 24 y 31 de diciembre un aumento de casos. Después de semana de carnaval también tuvimos un aumento de casos. Y ahora, ¿qué hecho diferente hubo desde el 1° de marzo hasta ahora en Salto y en el país? El hecho diferente fue que empezaron las clases presenciales. Y acá yo quiero hacer una aclaración: si bien hay docentes, auxiliares, funcionarios de toda la educación y estudiantes de las distintas áreas que dieron positivo, ahí no está el problema, el problema está en la movilidad que generan las clases.
Todos podemos ver que la ciudad es diferente desde el 1° de marzo.
El 1° de marzo teníamos 188 casos cursando la enfermedad, ese día hubo 0 casos nuevos y el índice de Harvard estaba en 13 y algo.
Catorce días después estábamos con más de 400 casos, con un índice de Harvard por arriba del 35% y con algunos días donde hubo 98 casos positivos.
Quizás dentro de 4 o 5 años venga un epidemiólogo u otro estudioso que diga: esto se debió a tal o cual razón. Pero por ahora no hay otra circunstancia nueva en el departamento y en el país que las clases. Y tampoco es la Educación Media el problema, porque los gurises a la UTU o al liceo van solos. Sin embargo, los escolares, educación inicial o CAIF generan más movimiento de gente, por lo menos el doble, porque los lleva la mamá o el papá, o un tío, o el vecino, a su vez también está el proveedor que lleva distintos productos al quiosco de la esquina de la escuela o a la cantina… Hay sin dudas un aumento de movimiento en la ciudad. Los ómnibus van más sobrecargados, ¿y qué le decimos a los gurises, que no suban?
-Los sectores más débiles de la sociedad son los más perjudicados si se suspenden las clases, dicen algunos…
Sabemos que la suspensión de la presencialidad afecta sobre todo a los sectores más vulnerables de la sociedad, por una serie de razones pero que ahora no vienen al caso, y que también en algún momento la sociedad deberá discutir… ¿Es la escuela la que debe hacerse cargo de determinadas situaciones o hay organismos, como el de la Seguridad Social o el Ministerio de Desarrollo, que tienen que acunar y apañar a esos sectores? Porque a los maestros les tiramos todas las responsabilidades, del aprendizaje, de la formación como ser humano…, pero también le tiramos la responsabilidad que sean contenedores de la realidad social.
A los maestros se los critica, pero hay que entender que son parte del proceso educativo y hoy por hoy están asumiendo una cantidad de roles más. Por ahí viene el pedido nuestro…