Edición Año XVII N° 877, lunes 2 de setiembre de 2024
ETAPAS. Acaba de terminarse el mes que es conocido como el de la nostalgia, porque se habla mucho en la previa de lo que será la noche del 24 de agosto, hay quienes además hacen negocios aleatorios a la organización de bailes, como la venta de música de los 70, 80 y 90, décadas buenas en cuanto a la cosecha de música pop y rock tanto a nivel rioplatense como de otras zonas continentales. Muchos pasamos nuestra adolescencia y juventud en esos años, así que la añoranza, por llamarlo de alguna manera, revive ciertos recuerdos.
La verdad es que ya ingresamos al noveno mes, hoy están faltando exactamente 120 días para la culminación de este año bisiesto, habiendo transcurrido ya 246 días de iniciado este 2024. Dentro de 19 días, en teoría, estaría ingresando la primavera a nuestro país, pero con estos cambios climáticos que venimos experimentando, habrá que ver.
COMPULSIVOS. No logro resolver aún la intencionalidad que hay detrás de las internaciones compulsivas de las personas en situación de calle. No me importa si quien legisló o quien ejecuta la ley es de derecha o de izquierda, me sigue quedando la duda detrás de la verdadera intención de criminalizar una situación vulnerable de más de tres mil uruguayos (el 0,1% de nuestra población) que se encuentran en esta situación.
¿Por qué mi duda? Por algunos argumentos que he venido escuchando últimamente. Las personas en situación de calle molestan a los vecinos por dormir en la puerta de su casa o de su comercio, entonces hay que sacarlos de ahí, y si reinciden, cometerán un delito.
Si la intención fuera encontrar un mejor pasar de estas personas y protegerlas de las inclemencias climáticas de frío o de lluvia por estar en la calle, no creo que la forma elegida sea la correcta, y que todavía se acuerden de este tema en plena campaña electoral, no sé, olfateo cierto tufillo que no viene precisamente de Dinamarca, como diría el finado Hamlet.
PULULANDO. Algunos me dicen que los periodistas que tenemos predilección por los temas políticos estamos de zafra. No sé, hago programas periodísticos en radio y televisión donde los actores políticos son sus protagonistas desde 1998 y no he parado. Trabajo en EL PUEBLO donde mi primer trabajo aquí fue la columna periodística dominical sobre política desde 2007 y este año se sumó una segunda columna los días jueves, y continúo.
Mi trabajo no es zafral, como se ve, lleva ya algunos años. Lo que en cambio he visto es que algunos comunicadores este año comenzaron a tener espacios políticos y a hacer notas a políticos en sus medios radiales y televisivos. Quizás ese mote de zafral caiga mejor a otros.
Lo bueno de esto es que los espacios en los medios de comunicación se multiplican para recibir los mensajes de los distintos candidatos de todos los partidos políticos pero cada cual con la particular impronta del comunicador de turno a la hora de preguntar, y eso suma, más allá de la etiqueta que se le dé a cada uno.
Hasta la semana que viene… y tilo pa’la barra!