Daniel de Vinatea – Vocero de Sales Operation and Customers Services Director, Vertiv LATAM compartió a nuestra redacción su visión y conocimientos con respecto a la incidencia de la tecnología en el medioambiente.
“Hacer frente al consumo energético es fundamental, sobre todo en un contexto donde las prácticas presenciales se han “mudado” al mundo virtual: ahora se trabaja y se aprende en casa. Todo esto representa una digitalización masiva como nunca antes vista, así también lo es el tráfico de datos.
Por ejemplo, los centros de datos representan casi el 1% del consumo energético total en el mundo.
Se prevé que el crecimiento del tráfico exponencial provocado por los nuevos servicios 5G aumente dicha cifra unas cuatro veces.
Para las compañías de telecomunicaciones y sus clientes, el pronóstico se traduce en un mayor consumo energético y costos asociados”.
Los sistemas de comunicación modernos han evolucionado significativamente desde los días de las centralitas y las llamadas de larga distancia, pero tal vez no lo suficiente: las arquitecturas de red tradicionales, de talla única, se han retrasado significativamente en la última década.
Las empresas de telecomunicaciones necesitan redes escalables que puedan adaptarse de manera fluida para satisfacer las demandas cambiantes y deben prepararse para casos de uso florecientes con dispositivos conectados en casi todas las industrias.
Si bien las arquitecturas tradicionales no han logrado satisfacer estas demandas, muchas de estas necesidades se abordan a través de sistemas 5G.
- ¿Cuáles son las estrategias que se utilizan para la optimización de la energía y su sostenibilidad?
-”Solo el 15% de la energía de las compañías de telecomunicaciones es consumida durante la transferencia de datos, mientras que un 85% se desperdicia como consecuencia de la pérdida de calor generada por los amplificadores de potencia y el equipo en reposo, cuando no hay transmisión de datos.
Es por esto que es esencial hacer frente al desperdicio de energía y aumentar la eficiencia del consumo energético, con el fin de ofrecer soluciones de infraestructura innovadoras.
Como ejemplo, Vertiv ha instalado sistemas de enfriamiento con tecnologías propietarias para reducir el consumo energético en su centro de datos y su huella de carbono en las instalaciones de telecomunicaciones.
Gracias a esta iniciativa se redujo el consumo energético anual en hasta un 30%, con la posibilidad de ahorrar hasta un 50% en el consumo energético anual.
Además de centros de datos y compañías de telecomunicaciones, estos sistemas son ideales para otros sectores, como la banca, la educación, la atención médica, el gobierno y la distribución minorista.
¿De qué forma la pandemia ha hecho redirigir la forma en llevar adelante proyectos y negocios?
“La pandemia de la COVID-19 ha cambiado de manera radical la manera en que las compañías dirigen los negocios y la forma en que los clientes interactúan con estas.
Sin embargo, por medio de esta importante transformación del mercado, muchas compañías, incluidas las de telecomunicaciones, se han comprometido a hacer grandes esfuerzos en sostenibilidad.
Nos sentimos orgullosos de apoyar a estos clientes al facilitar la continuidad empresarial y los servicios críticos, y al ofrecer soluciones que contribuyan con un mejor uso de los recursos del planeta.
En vista de que la pandemia de la COVID-19 obligó a las compañías a operar de manera remota y a los clientes a migrar a transacciones y actividades digitales, tanto desde las operaciones bancarias, compras y educación hasta la atención médica, los miembros del personal en los centros de datos y otras instalaciones de misión crítica se convirtieron en trabajadores esenciales.
Ciertamente estamos frente a unos verdaderos superhéroes” de la pandemia.
-¿Qué cambios radicales han experimentado las telecomunicaciones?
“Las telecomunicaciones y sus tecnologías de red celular han recorrido un largo camino.
Desde el primer poste de telégrafos en el siglo XIX y el teléfono de disco giratorio en el siglo XX, hasta el Internet omnipresente del siglo XXI, las telecomunicaciones se han desarrollado rápidamente.
El próximo paso es la red 5G, donde será necesario el predominio de una gestión
de la energía efectiva para la nueva red celular.
En la década del 50 el desafío era la rápida comunicación a través de largas distancias.
En los ‘90 se dio el boom del acceso general a las
Telecomunicaciones, con menores costos de transacción. Ahora estamos en la Era de la Coordinación, donde el desafío es la disponibilidad, la eficiencia y la preservación de los recursos de telecomunicaciones, donde como beneficio se esperan los mejores resultados de los recursos.
La red 5G puede reducir el exceso de consumo energético, pero quedan muchos desafíos por enfrentar.
Por esto es clave que las empresas y consumidores estén preparados para conocer las opciones disponibles en cuanto a hardware energéticamente eficiente, utilizar recursos de energía renovable in situ y participar activamente como prosumidor en el ecosistema de energía”.
