Una delegación de hinchas de Nacional que responden a «Salto es bolso» y de alguna manera emparentados al accionar del consulado tricolor en Salto, se trasladaron a Paysandú, en ocasión del reciente partido ante Cerro Largo.
Algunos días antes, pasó lo mismo con adeptos a la causa de Peñarol, cuando los aurinegros afrontaron un partido en Paysandú, por el Torneo Apertura.De acuerdo a algunos números que se transmitieron a EL PUEBLO, unos 150 salteños fueron testigos del juego entre Nacional-Cerro Largo. Los 120 kilómetros de distancia, y la impecable carpeta asfáltica de la ruta 3, hace que «en menos de lo que canta un gallo» se pueda llegar a la capital de la Heroica. El hecho es letal: Paysandú tiene fiestas del fútbol que Salto no puede.Es un tema recurrente, que data de años y que se plantea en función de una realidad: por estos lares «naranjeros» no tenemos un estadio con capacidad locativa suficiente ni medidas reglamentarias. Paysandú lo tiene. Flores lo tiene. Colonia lo tiene. Florida lo tiene. Durazno lo tiene. Cerro Largo lo tiene. Canelones lo tiene. Maldonado lo tiene. Tacuarembó lo tiene. Rivera lo tiene. Y Salto no lo tiene.EL DISCURRIR DE LOS AÑOSLa verdad sea dicha. En las últimas semanas los hermanos sanduceros. nos han pegado flor de paliza. Entre la notable Semana de la Cerveza, más Peñarol y Nacional jugando en el estadio con capacidad para 18 mil personas, los salteños solo podemos atinar a comparecer si es posible, o caso contrario, apelar al dictado de la televisión, porque ninguna otra opción surge a mano.Habría que coincidir que el fútbol salteño por sí solo o la Liga Salteña de Fútbol por sí sola en este caso, NO puede abrir el cauce a una solución de fondo. Y la solución de fondo, es la construcción de un nuevo estadio, con capacidad mínima para 15 mil personas. Ni con pases mágicos o recetas milagrosas, el Dickinson puede alcanzar esa capacidad locativa más o menos básica.LAS RAZONES COLECTIVASPor lo tanto, para alcanzar lo que Paysandú tiene y propone, esencial UN ESTUDIO DE FACTIBILIDAD, pero sabiendo bien qué es lo que se quiere. si es que se quiere.Si la misión-visión futurista es esa, deberá mediar por ejemplo, un encuentro corporativo que abarque a la Intendencia, Comisión Técnica Mixta de Salto Grande y Centro Comercial entre otros. Un estadio potencial no solo alimentaria la opción del fútbol, sino la concreción de otros espectáculos y en esa línea de proyección, el comercio local puede ser soporte también.El hecho es uno: cuando Paysandú nos revuelve la herida de nuestro no poder, solo atinamos al refriegue de los lamentos encadenados. Cuando en verdad de lo que se trata es establecer, porque otros tienen lo que Salto no tiene. Y cómo hacer para tener lo que es posible tener. ¿O es tan complejo tener lo que otros tienen? -ELEAZAR JOSÉ SILVA-