No es novedad que la tendencia a darle un tinte político a cada palabra o acción que se hacen públicas es moneda corriente por estos días. Como tampoco es novedad que, máxime en cercanías de una elección, cada uno quiera “arrimar agua para su molino” o hacer que prospere “su propia chacrita” antes que el bien común, por utilizar algunas de las expresiones más populares ante este tipo de intencionalidades.
El comentario viene al caso a propósito de la jornada de limpieza en Costanera Norte, promovida por el grupo “Recuperemos la Costa de Salto”, que se llevó a cabo en la mañana del pasado sábado, desde la intersección con avenida Paraguay hasta la zona del Salto Polo Club, aproximadamente.
Vale decir y destacar, ante todo, que fue una jornada catalogada por sus organizadores como “muy positiva y exitosa”. Así lo hicieron saber algunos de los participantes con los que se comunicó EL PUEBLO en el mismo momento en que se realizaba la actividad, quienes se mostraban además gratamente sorprendidos por el número se gente que se había sumado a la causa: alrededor de 90 personas y de todas las edades. 
Pero (siempre parece haber uno)…Algunas personas, en vez de acercarse a colaborar prefirieron, desde la comodidad de su casa, aprovechar la ocasión para “hacer política”. Y es así que enfatizaron, incluso en medios de prensa digitales que la movida respondía a un “descontento con la administración departamental actual por su ausencia en la limpieza”, lo que daba de cierta forma a entender, como interpretaron otros, que se trataba de una “movilización orquestada” para favorecer a la oposición del actual intendente. Nada de eso es verdad. Damos fe.
La actividad surgió a impulso del grupo ya mencionado, cuyo principal objetivo es empezar a trabajar para combatir la erosión que está literalmente terminando con nuestra costanera, pero que sus integrantes creyeron conveniente como primera medida, incluso para encontrarse cara a cara (ya que el grupo se conformó en Facebook y fue por ese medio que se convocó para el sábado), una caminata y limpieza.
Habría que tener la suficiente honestidad para reconocer que no todo sirve para “hacer política”. O no debería. En el grupo que trabajó el sábado y que trabaja cada día, aunque más no sea aportando ideas, hay gente incluso identificada explícitamente con todos los partidos políticos.
Que se hayan juntado para hacer algo por el bien de Salto (¡hacer!…porque hablar es fácil) es lo destacable; no otras cosas que injusta y malintencionadamente se han señalado y que podrían, lamentablemente, influir en el ánimo de quienes sin siquiera pensar en política partidaria, se mostraron dispuestos y entusiasmados con la tarea.
Uno de los impulsores de “Recuperemos la Costa de Salto”, Gustavo San Andrea, expresó recientemente: “Aclaro, el grupo no es político, es un grupo en formación que convocamos a todos los salteños a sumarse a esta causa de una forma diferente, mientras haces ejercicio recoges basura. No importa de qué partido político sos.
Son todos bienvenidos, están todos invitados. Gracias Salto. Gracias gente, y gracias a los funcionarios de la Intendencia que me llamaron preguntando dónde estábamos depositando la basura, que ellos con los camiones la iban a recoger. Hay que aclarar y decir las cosas como son, y no como las describen algunos mal pensados, o mal intencionados. Parece mentira que cuando intentas hacer algo por mejorar, siempre hay gente que te critica. Salto no es de un Partido Político, ni de ningún Político Salto…es nuestra casa. Por lo tanto tenemos que sacarnos esa mezquindad. Y tomar conciencia de cuidar lo que es nuestro”.
Nada que agregar. Salvo felicitar a quienes sin ningún otro interés que el de colaborar con todos, se sumaron y se siguen sumando, más allá de la estrechez de mente y sentimientos de unos pocos… que nunca faltan.
JORGE PIGNATARO
