25 de abril, 1988-2022
Ubicado en el km 76,5 de la Ruta 31 y creado el 25 de abril de 1988, fue entonces el pasado lunes que el Liceo Rural de Rincón de Valentín cumplió sus 34 años de vida.
La comunidad educativa, en especial los alumnos y docentes han venido trabajando sobre el tema con el fin de dar a conocer esa rica historia, tan importante para las varias localidades de las que provienen sus alumnos. No ha faltado, sin dudas, el recuerdo para el primer Director, impulsor del proyecto, Prof. Fulvio Cousin; pero tampoco faltó la valoración del trabajo de su actual Directora, Prof. Janine Martínez, así como de otras autoridades que durante muchos años aportaron su labor allí, como la Directora Beatriz Gómez (hoy Directora del Liceo N°1) y el profesor adscripto Nelson Hernández (actualmente retirado por motivos de salud). En diálogo con EL PUEBLO, Janine Martínez informó que en este momento el liceo está trabajando con atención a un total de 245 alumnos, de primero a sexto año, y cuenta con 50 docentes. Entre las localidades de las que llegan los alumnos cada día, además de Rincón de Valentín, pueblo en el que está inserto el liceo, puede mencionarse Colonia Itapebí, Biassini, Celeste, Pueblo Olivera, Pueblo Ferreira, entre otros, pero además algunos bastante más alejados como Cerros de Vera y Carumbé. Precisamente, unos quilómetros más adelante del liceo, por la misma ruta, está ubicado el Hogar Estudiantil de Valentín, en la actualidad dirigido por el profesor John Llobet, donde permanecen de lunes a viernes muchos de estos jóvenes. Otros viajan todos los días. Se cuenta con un ómnibus que, incluso antes que amanezca, se encarga de iniciar la recorrida por los diferentes pueblos, luego queda en el local liceal hasta el fin de la jornada, alrededor de la hora 14, momento en que vuelve al recorrido dejando nuevamente a los estudiantes en sus respectivos lugares de origen. Las clases se inician cada día a la hora 7.30. Las épocas de esquila, en que muchos jóvenes encuentran un trabajo zafral, han sido habitualmente meses en que la deserción al sistema educativo de hace sentir. Sin embargo, al decir de la Directora Martínez, «si bien los chiquilines siempre están tentados de ganar dinero trabajando, hemos podido revertir bastante esa situación y que sigan estudiando, lo logramos apuntando sobre todo a no perder el vínculo con ellos, aunque estén en alguna otra tarea».
Por otra parte, vale recordar que en el mes de setiembre, se vive en aquella zona del departamento un ambiente muy especial: la preparación y realización del Festival del Joven Rural, ya con varios años de trayectoria y organizado por este liceo. En ese sentido destacó Martínez la buena disposición de toda la comunidad educativa, que acompaña y apoya, y se logra una fiesta «que también es muy importante desde lo educativo-pedagógico, ya que se trabajan allí varios temas curriculares, siempre con el acompañamiento de los propios docentes». Con una celebración que acaba de pasar por los 34 años de la institución, con una fiesta del Joven Rural que ya se avizora con mucha expectativa (sobre todo porque la pandemia impidió su realización estos dos años anteriores), y con el desafío de un año lectivo por delante, la Directora envió a la población el mensaje firme de «que las familias sigan apostando a la educación y a este liceo, como ícono que es dentro de la ruralidad del Uruguay».