Tiene 27 años, desde aquella vez en el Karting hasta el objetivo de
ahora en Súper Turismo. Los 90 puntos en la punta compartida
-Tiran los genes!
«Y bueno…..de repente sí. Están ahí, ¿no?. Mi padre fue parte de esta pasión y en buena medida apareció esa tendencia en mi. La inclinación bien desde chicos. De repente sí, la genética tiene que ver».
-Vos, el auto, la búsqueda. Sensaciones que no faltan.
«Siempre se habla de adrenalina en estos casos. Yo digo que también es la felicidad de uno. De hacer lo que uno siente en materia de deportes. Quizás la palabra sea felicidad».

-Siempre habrá una historia detrás.
«Aquella que nació cuando tenía 6 años y comencé a competir en karting. O sea que superé los 20 años en ser parte de todo este mundo».
-Este mundo que de repente hace a la legitimidad del orgullo personal.
«Desde lo personal a lo colectivo que también juega. Hablo del Ingeniero del equipo, que es argentino, pero a esta altura un salteño más. Pero además, los mecánicos, todos de aquí».
-A la hora de evaluar: ¿gana el piloto en función del auto, o el piloto es capaz de marcar la diferencia?
«En el Súper Turismo, los motores y los frenos están en un pie de igualdad a nivel de todos los autos. Es algo que no se puede alterar. Por lo tanto, el rol del piloto pasa a ser sustancial, gravita. Para alcanzar respuesta, la validez de ese combo. Por eso mencionaba a los mecánicos, a quienes están detrás, para el logro de la puesta a punto.
En lo personal, tiene que ver aquella primera escuela en el Karting. Es como el Baby, para el fútbol. El inicio desde ese abajo. Uno se va nutriendo de enseñanzas. Los hechos nos van situando en el lugar que se pretende».
ANDRÉ LAFÓN ACERBIS (27) sabe que llegará al fin de semana en condiciones potenciales, de ser Campeón Uruguayo en Súper Turismo.
A nivel de automovilismo en Uruguay es la máxima competencia, y entre sábado y domingo en el circuito de «El Pinar», la séptima y octava fecha.
Igualmente para ellos, la pandemia pegó duro. En condiciones normales el calendario se desarrolla entre marzo y diciembre, con 8 fechas en la suma total.
En este año, la alteración inevitable: desde setiembre el retorno a la acción, para establecer de hecho cuatro fechas dobles. Con la marca FORD, André ha sabido de un trayecto vital, a tal punto que con Fernando Echegorry de Toyota, suman 90 puntos antes de afrontar las dos fechas de conclusión. Claramente: uno de los dos será el rey. Una corona pendiente.
EL ÚNICO DEL INTERIOR
Aunque las pistas de Mercedes y Rivera fueron habilitadas, lo cierto es todas las fechas se han disputado en «El Pinar». Hay que tener en cuenta que la mayoría de los pilotos residen en el sur del país, «y en mi caso soy el único del Interior. Ponemos dos autos en pista, y el restante corre por cuenta de Nicolás Collazo como piloto.
Para la suma de los torneos, en un caso por pilotos y en el restante por equipos. El nuestro es un equipo nuevo, con cuatro años de vigencia y como esultado motivacionalmente lo mejor, enfrentados a marcas cuya trayectorias no falta, como en los casos de Toyota, Peugeot, Chevrolet y Citroen.
Lo del fin de semana que viene, hace a las ganas de ser campeón. Lo mental supone también una influencia en sí mismo. Es una categoría en que la relevancia del piloto cuenta o se descarta. Cuando se gana, no es solo una consecuencia. La suma de factores que rige. por eso hablo de combo en materia de situaciones a favor, que en nuestro caso la tenemos.
Y tenerlas, es reconocer que una base está planteada y que más allá de la ilusión de ser campeón, existe un marco que lo ampara. Desde el piloto al auto y quienes no dejan de ser partes de un fin compartido».
-ELEAZAR JOSÉ SILVA-