RECURRENTE. Pareciera que no hubiese otro tema en la agenda informativa que no sea hablar del coronavirus. Cualquier tema que uno comience a leer, ver o escuchar en los distintos medios de comunicación, siempre deriva por aquí o por allá en la pandemia.
Tratamos entonces de escapar de esa realidad, hacemos zapping en la tele o buscamos por internet medios de prensa de otros países y notamos que están en la misma, es ahí que comenzamos a comprender que la realidad que nos rodea está pasando en todo el planeta y no hay para dónde escapar.
Pero, ¿comprendemos realmente? Pareciera que no, porque una función que cumplen las redes sociales –cuando no desinforman- es viralizar imágenes de lo que ocurre en diversos rincones del planeta, ni qué hablar de nuestro país, como por ejemplo las que veíamos este domingo temprano a la mañana, cuando fueron colgados videos mostrando una aglomeración de jóvenes trasladándose de un lugar para otro al término de alguna fiesta –seguramente- en La Pedrera, todos sin tapabocas ni «distanciamiento social», la mayoría con botellas o latas en sus manos, iban muy campantes, alegres, sin darse cuenta del peligro que estaban corriendo, pero tengo claro que tampoco les importaba. Todos jóvenes. Ahora solo resta cruzar los dedos.
¿Cómo no va a ser entonces un tema recurrente en los medios si parece que seguimos sin entender el peligro que estamos corriendo? Porque, me explico, supongamos que alguno de estos chicos se contagia de COVID 19, cuando retorne de sus vacaciones a su casa llevará el virus consigo y posiblemente contagie a su familia y a todo aquel con quien hubiese mantenido contacto en las horas siguientes. O sea, no se trata solo de cuidarse uno para que no nos toque, sino cuidarse uno para que tampoco le toque a alguien cercano, como puede ser algún hermano, padres, abuelos…
Así que sepamos esto desde ya, si este virus se propaga más de lo que lo ha hecho hasta el momento, justo en el día en que se alcanzó un nuevo récord tanto en Salto como a nivel nacional de casos activos de COVID, no serán las autoridades nacionales ni departamentales las responsables de que eso suceda, seremos nosotros.
Es por eso que este tema se ha vuelto recurrente en los medios de comunicación, porque es necesario machacar y machacar sobre lo mismo hasta que nos entre en la cabeza.
JUSTICIA. Es de justicia recordar, para algunos desmemoriados e inocentes que pueden llegar a caer en la perversidad de algunos argumentos tomados de los pelos que han acusado directamente a organizaciones sociales y sindicales que con sus movilizaciones y protestas han sido los gestores de estos picos de contagios, que las últimas movilizaciones constatadas corresponden al mes de noviembre del año pasado, y que el ciclo del virus es entre 15 y 21 días, no más que eso, por lo que materialmente es imposible que el origen de este pico creciente que hoy tenemos se deba a dichas movilizaciones.
Si lo que se pretende en realidad, es criminalizar socialmente al pueblo organizado a que se exprese libremente en sus legítimos reclamos, bueno, sepámoslo desde ya, flaco favor se le hace a nuestro sistema republicano y democrático de gobierno.
Hasta la semana que viene…
Por: Leonardo Silva