El presidente de la Liga Salteña de Fútbol apeló a una sentencia histórica y que cada tanto, suele replantearse. «No podemos matar la gallina de los huevos de oro», aludiendo a la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande.
Sucede que si no fuese por el amparo económico del organismo binacional, todo sería inviable para determinados deportes salteños de un tiempo a esta parte. Y en especial el fútbol.
Por lo tanto, cuando el lunes en el Consejo Superior se plantearon los casos del Consejo Único Juvenil y el Fútbol Femenino, que virtualmente permanecieron al margen de las gestiones, no se posterga una chance: que se activen otras y que sean contemplados. Pero es ahí, cuando el presidente de la Liga invocó a «la gallina de los huevos de oro».
Una manera de moderar o equilibrar la tentativa de colaboración monetaria, desde la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande.
CUANDO TODO
SERÁ GANANCIA
De cara al inicio de la temporada en la «A», pactada para el 5 de setiembre, mes posible de abrigar una ilusión: que se admita un determinado aforo en los escenarios.
Esto es, un determinado porcentaje de aficionados. Los neutrales lo tienen claro y la coincidencia existe con otras opiniones o enfoques, de aquellos que tienen relación con el entorno del fútbol.
«Que no se quejen los clubes; para ellos todo será ganancia. El hecho es que al estar contemplado el presupuesto básico (pago a los jueces, a la seguridad, las leyes sociales, etc, todo lo que se recaude (mucho o poco), será ingreso para las arcas de las instituciones».
A partir de esta situación se reconoce que «con la celeridad del caso, podrían comenzar a recobrar determinada estabilidad económica. Solo les quedará manejar el presupuesto en función de los ingresos. Se sacan el 90 por ciento del peso de encima».
