back to top
21 C
Salto
martes, agosto 12, 2025

Historia del turismo en Paysandú III parte

- espacio publicitario -
Diario EL PUEBLO digital
Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/ks3e

Por Juan Andrés Pardo

Magíster en Dirección y Consultoría Turística egresado de Universidad Europea del Atlántico. Fue Coordinador de Turismo IDP en el período 2015-2020
Descubrí Paysandú
Descubrí Paysandú fue el sello con la que se promocionó el destino Paysandú a través de folletería, portal web y redes sociales. Sin dudas esto generó un mejor posicionamiento del departamento como destino turístico en medios digitales, lo cual no es menor teniendo en cuenta la importancia que ello implica hoy a la hora de vender un producto o servicio al mundo.
También se creó la primera guía turística del departamento en formato papel y digital.
SI bien hoy la actual Dirección de Turismo mantiene el portal y la cuenta Facebook Descubrí Paysandú, desde el propio gobierno departamental surgieron nuevas marcas (tierra heroica, agenda Paysandú, entre otras) que suponen un retroceso en lo que refiere a la difusión y promoción del destino, ya que la saturación de marcas genera mensajes confusos.
Por otra parte, durante el periodo Caraballo hubo una apuesta muy importante al trabajo en clave de región a través del Corredor Pájaros Pintados. Vale la pena leer algunas editoriales de la década de los ´90 del diario El Telégrafo en los cuales se planteaba la necesidad de que Paysandú generara acuerdos de integración regional como el que finalmente esta política significó.
En Paysandú las primeras termas descubiertas fueron precisamente las de Guaviyú.
Allí comenzaron, en 1957, las excavaciones de ANCAP en busca de petróleo. No se encontró “oro negro” pero sí el agua termal que años después (1965) llevó a la Intendencia de Paysandú a adquirir predios en la zona, con el objetivo de explotar allí un complejo turístico. El primer entubamiento del pozo termal ocurrió en 1972.
Guichón, Almirón y Montes del Queguay Muy posiblemente el primer hito turístico en la ciudad de Guichón, haya sido la apertura del primer hotel, a instancias de un maquinista del ferrocarril de nombre José Mendiburu. Aunque según consigna José Firpo en su libro sobre “Historia de Villa Elisa”, previo a esos años, en el pueblo Piñera (por entonces con mayor relevancia como localidad que Guichón) ya existían más de dos hoteles u otras modalidades de alojamiento para los visitantes.
En 1949, la Comisión Departamental de Fiestas y Turismo propuso expropiar bosques en la zona del Rincón de Pérez, lugar donde hoy se encuentra el acceso principal al Área Protegida Montes del Queguay. El edil Adolfo Mac Ilriach fue quien presentó dicho proyecto (elaborado por el Dr. Alberto Roldán) a la Junta departamental, con el fin de convertirlo en centro turístico y en un área de protección de fauna y flora autóctona. En 1991, el guichonense Héctor Urruty retomó dicho proyecto volviéndolo a presentar en la Junta. En 1994, se logró incluirlo como Área Protegida en el recientemente creado MVOTMA. En el 2000 se promulgó la Ley de creación del Sistema Nacional de Áreas Protegidas, la cual se reglamentó en 2005 y finalmente en 2009, se designa Área protegida a Montes del Queguay. Con respecto al Centro Termal Almirón, en 1975 inauguró sus primeras dos piscinas además de un servicio de bar y restaurante. En este lugar, en 1958 ANCAP había comenzado la búsqueda de petróleo que no tuvo resultados positivos pero que tuvo igual sus frutos con la extracción de agua termal salada, única en la región. Es importante destacar que previo a dicha inauguración, en los años setenta, hubo una activa participación de la comunidad guichonense que se organizó a través de una Comisión de Turismo para trabajar por la inauguración de uncentro termal.
Había por aquellos años un diario local “El Terruño” desde el cual se llamaba a la población local a participar de las instancias.
En setiembre 1999, se anunciaba en una edición del suplemento “Domingo” de El Telégrafo la generación de un nuevo emprendimiento sobre turismo aventura en Guichón, desarrollado
por el Club Queguay Canoas con el apoyo de la Agrupación Creativo, un grupo auto organizado integrado por diferentes actores locales que surgió con la finalidad de impulsar el turismo
relacionado a las riquezas naturales e históricas de la ciudad. Algunos de aquellos nombres siguen trabajando en el turismo por estos días, como el caso de Carlos Urruty.
En principio ofrecían propuestas de turismo de caza, básicamente apuntado a turistas extranjeros dispuestos a pagar interesantes sumas de dinero, pero con los años fueron modificando la iniciativa hacia un turismo de naturaleza alejado de aquella opción.
En el fascículo referido a Paysandú, serie “Los departamentos” (1970) se puede encontrar la primer referencia en una publicación turística de carácter nacional a este lugar.
El documento lo describe “Parque natural poco conocido en el triángulo formado por el Queguay chico y grande que tiene posibilidades de futuro”.
Durante el período 2015-2020, a instancia del Municipio local, se acondicionó el Balneario Santana ubicado en las costas del arroyo homónimo a pocos kilómetros de la ciudad.
La Meseta
La Guía de Turismo de Shell en su edición de 1954, destacaba como un atractivo principal en Paysandú a la Meseta de Artigas. Aquella publicación sugería visitar este lugar por la riqueza de su paisaje y su relevancia histórica por estar ubicada “frente a la Estancia El Hervidero”, lo cual es un dato erróneo. Posiblemente desde antes incluso, también haya sido mencionada en otras guías o publicaciones turísticas, ya que el monumento se inauguró en 1899. Lo más importante con respecto al desarrollo en este espacio, comenzó a gestarse en 1994. En edición del 6 de agosto, El Telégrafo informaba que el MINTUR destinaría 25.000 dólares para impulsar el desarrollo turístico en ese lugar. El entonces intendente Larrañaga señalaba como prioridad “desarrollar tareas de limpieza del monte indígena para delinear zona de camping”, buscando impulsar el ecoturismo como posibilidad de complementar la oferta sol y playa nacional. Ese mismo año se inauguraría el “Encuentro con el Patriarca” uno de los eventos más promocionados -luego de la Semana de la Cerveza- que desde su inicio ha tenido a la Meseta como epicentro. Esta celebración tuvo también a Larrañaga como uno de sus máximos impulsores.
La Fiesta principal
En la semana de turismo de 1966, se realizó la primera edición de lo que es hasta nuestros días, la principal fiesta tradicional del departamento: la Semana de la Cerveza. Dicha celebración surgió a partir de un empleado de Norteña, Jorge “Chino” Gavary, quien luego de vivir una fiesta popular durante unas vacaciones en Argentina, decidió importar la idea a Paysandú. La antigua Cervecería y Maltería Paysandú era la proveedora de una de las mejores cervezas del país y la ciudad entera sería el centro de diversión para los visitantes que llegarían desde diversos puntos de la región.
Tradicionalmente la Semana de la Cerveza ha funcionado a través de un Comité organizador que en realidad en las últimas décadas quedó reducido básicamente a recursos económicos financiados u obtenidos por la Intendencia, lo cual en cierta medida ha hecho perder la esencia de la celebración, ya que se ha convertido en un karma con posibles costos político para cada administración de gobierno.
Año a año la atención para los sanduceros se ha centrado en la cartelera de espectáculos, sin embargo, durante la gestión Caraballo se generaron iniciativas muy novedosas relacionadas
con la profesionalización del patio de los artesanos, el predio ferial y la realización de una novedosa agenda para disfrutar durante toda la semana en diferentes punto de la ciudad (circuitos culturales e históricos, ferias callejeras, visitas a cervecerías artesanales, etc.)
De la caza indiscriminada a lo sustentable
En ocasión de realizarse la Semana de turismo de 1999, la revista Preguntas publicaba una guía turística en su edición número 9, donde destacaban lugares para visitar en Paysandú más allá del Anfiteatro y predio ferial. En esa misma publicación, en una nota aparte, el periodista Danilo Maidana manifestaba su preocupación por la agresión a la naturaleza durante esa semana: “Semana santa: camping, monteadas y cacerías”. En el desarrollo del artículo, Maidana señalaba que “algunos uruguayos no saben convivir con la naturaleza” y alertaba sobre las diferentes especies de fauna que estaban extinguidas y/o en peligro de extinguirse en Uruguay, demandando a la misma vez la construcción de una “cultura de armonía entre el humano y lo natural”.
El artículo es interesante porque Paysandú históricamente ha sido un destino elegido por quienes practican esa actividad, hoy regulada. A manera de ejemplo, en la Guía de turismo de Uruguay 1954 editada por Shell se sugería visitar Paysandú para practicar la caza de “loros, perdices, palomas, liebres y aves de rapiña”. En 1970 la Editorial “Nuestra tierra” publicó la serie Los departamento.
En las páginas 44-45 del fascículo número 11 referido a Paysandú, se destacaba una “guía para el cazador deportivo” en la que se detallaban las especies frecuentes y sugería que tipo de arma utilizar para su caza.
Cuando comenzó a reglamentarse la actividad la promoción de esta propuesta turística, se dejó de lado. Muchos de los que ofrecían el servicio readecuaron la apuesta (como el caso de los guías guichonenses) para comenzar a ofrecer alternativas relacionadas al ecoturismo tales como el senderismo interpretativo de fauna y flora y el avistamiento de aves, entre otras opciones.
En otra parte de la sección “páginas para el turista” del fascículo sobre Paysandú de la serie Los Departamentos, también aparece una “Guía de pescador del río”, que posiblemente sea de las primeras publicaciones referidas a dicha actividad en tierras sanduceras.
Próximo viernes IV y última entrega

Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/ks3e
- espacio publicitario -Bloom