Como lo hace habitualmente cada cierta cantidad de meses, esta semana que pasó, Juan José Barreto volvió a realizar una recorrida por los diferentes medios de prensa. Barreto es el padre de Charly Ferreira, el joven que a comienzos del año 2007 apareció sin vida a un costado de la ruta 31 (un rato antes había sido retirado por la Policía de un local bailable de la zona) y cuya muerte aún no se ha aclarado.
El objetivo fundamental de Barreto, como lo dice constantemente, es «que se haga justicia y nuestra familia no va a descansar hasta que eso ocurra», pero, mientras tanto, quiere «que el tema no se olvide y sobre todo que de una vez por todas se haga el careo entre el policía que se quebró y los responsables que ese policía menciona».
Cuando dice «el policía que se quebró» se refiere al ex agente Márquez, que participó de aquel procedimiento policial de 2007 y asegura que es la misma Policía la responsable de la muerte de Ferreira.
Hay que recordar que el careo previsto nunca pudo hacerse pues, cuando llegó el momento, «la jueza no estaba presente y la fiscal tampoco», dijo Barreto.
«La pandemia complicó algunas cosas, como la realización de una multitudinaria marcha en reclamo de justicia que pensaba hacerse por el centro de Salto este año», recordó.
«De la Policía nunca tuvimos una investigación, ¿y la Justicia por qué no investiga?, si hay pruebas», expresó finalmente Barreto, quien agregó que debió cambiar de abogado ya que el profesional que estaba a cargo del caso, «después de más de diez años trabajando en esto, me dijo que no quería seguir porque estaba cansado y desgastado».
