La victoria de las tres P
El pasado 22 de julio, en una reunión entre el MGAP, representado por su máximos jerarcas, el Ministro Mattos y el Subsecretario Buffa, y la Intendencia de Salto, representada por el Intendente Andrés Lima, se consolidaron aspectos esenciales del proceso de creación de la Central Hortícola del Norte.
Este proyecto va dejando atrás las dudas, los “no se puede”, las trabas centralistas e incluso algunos intereses particulares.
Es un proyecto largamente acariciado por generaciones de salteños -permitámonos recordar la fantástica renovación tecnológica e institucional de los años 80’ y 90’ del Movimiento Horticultores de Salto y la concepción del Intendente Malaquina de un parque agroalimentario.
Es una iniciativa pensada desde la producción y los productores, ubicada en el propio centro productivo del país (un tercio de la producción nacional de frutas y hortalizas proviene de esta zona). La Central Hortícola no es un objetivo en sí mismo, sino la plataforma para mejorar integralmente el desarrollo de la cadena hortifrutícola en la región. En especial, de las condiciones de trabajo de cientos de unidades familiares, que garantizan producción sustentable con crecimiento económico, que retienen y radican población en el medio rural, que configuran una reserva de tradiciones culturales y productivas transmitidas de generación en generación. Desde principios del Siglo XX, un “saber hacer” autóctono, único e irrepetible, seña de identidad territorial de Salto .
Además, es una inversión con coparticipación del Gobierno Nacional y Departamental, que involucra a partidos y administraciones de diversas tolderías políticas, y con efectos en las economías locales, de la ciudad y la región. Una fuerte apuesta a la descentralización del país.
En particular, se ratificó un aspecto sustancial de este proceso: la participación de los productores nucleados por la Asociación Salto Hortícola. Es esencial para la Central Hortícola el rol de los productores, asociados y organizados, como pilares fundacionales que sostienen la construcción física. Sin ellos, nada hubiera sido posible.
Aquí se plasma una consigna de vida para enfrentar desafíos que la sociedad nos plantea, las 3 P como reglas básicas: Paciencia, Persistencia y Pasión.
Y la intergremial de productores Salto Hortícola, en la imaginación-concepción-construcción de la Central desplegó ampliamente esas 3 P. Porque fue imprescindible la Paciencia para soportar tanto desaire, tanta desconfianza, tanto desinterés de otros actores, tantas puertas cerradas, tantos requisitos nunca validados.
Y después, la Persistencia para impulsar ideas colectivas que contemplaran a todos los productores, más allá de su ubicación, tamaño u orientación productiva, en un proyecto de TODOS. Hasta incluyendo otros actores necesarios para dar amplitud y jerarquía: intermediarios, productores de otras zonas e instituciones nacionales. Cabe señalar, a riesgo de que la lista quede incompleta a la Intendencia a través de 3 administraciones, a las Universidades, a otras gremiales empresariales, al INIA Salto Grande. Asimismo, profesionales locales de las más diversas disciplinas que aportaron desde el saber científico. En ese entramado social propio y salteño, se fue tejiendo un proyecto de descentralización desde abajo, desde lo local, desde el territorio, acumulando paso a paso y generando las respuestas una a una, año a año, desde aquél lejano 2012.
Y por supuesto, la última P: Pasión. Imprescindible en este largo camino (diría de hormigas
obreras, porfiadas, campeonas en saltar obstáculos, quizás nunca en línea recta pero siempre
yendo…)
Un grupo fantástico de dirigentes y referentes del sector productivo que metieron horas y horas de reuniones, asambleas, talleres, discusiones. Una constructiva contrastación de cultura centenaria de chacra con los más diversos niveles técnicos y gubernamentales, kilómetros a costa propia a la capital y departamentos vecinos, convenciendo de la propuesta y contagiando optimismo y confianza en los recursos locales. Aquí de nuevo es necesario citar a uno en particular, para que en su persona se reconozca e identifique la larga cadena de destacadísimos productores: el paladín Ítalo Eduardo Tenca, delegado de los productores del Norte en la Junta Nacional de la Granja desde hace más de 15 años y ahora integrando el Directorio de la UAM en un esfuerzo HONORARIO sin parangón.
Consolidar este proceso local tan virtuoso deberá ser la primera misión. Sin lugar a dudas, se debe continuar con el fortalecimiento de Salto Hortícola como instrumento y expresión legítima de TODOS los estratos vinculados a un sector productivo característico de Salto.
La Central Hortícola del Norte, de nuevo, no es un fin en sí mismo. No es “solamente” un parque
logístico-industrial del sector hortícola.
Es un modelo, un ejemplo, un paradigma del desarrollo local salteño. Un espejo donde los demás sectores de nuestra tierra pueden mirar y decir: “se puede”, tanto sean asociaciones académicas, profesionales, productivas, o empresariales. Con Paciencia, Persistencia y Pasión, se puede!!!
Alejandro Secco
Julio de 2022
