En el marco del Día de Lucha Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, Florencia Stoll Soto – referente territorial de la Comunidad Trans CTU colectivo Trans del Uruguay compartió sus reflexiones con EL PUEBLO. “Necesitamos darle continuidad a la lucha contra una sociedad de doble discurso e hipócrita. ¡Basta de discriminación! ¡Basta de tanta heteronormalidad! Rompamos barreras y estigmas… rompamos todo aquello qué nos quieran condenar. Qué nuestra sociedad nos acepte sin prejuicio alguno y que podamos juntos transitar con respeto, tolerancia y siempre firmes. ¡Viva la diversidad! ¡Viva la vida!”.

Florencia Stool hizo énfasis en que “como comunidad y como referente territorial del colectivo tren del Uruguay CTU seguimos reivindicando los derechos y apostando a que las personas puedan seguir incluyendo, insertando, visibilizando y no discriminando a las chicas trans a los chicos trans a las personas trans que somos tan vapuleadas y vulneradas ante una sociedad tan hipócrita. Por ello no solamente es un día lucha contra la discriminación sino que abarca muchas cosas. Es un momento de luchar, de buscar la paz, la armonía y que se puedan abrir puertas a la inclusión. Vamos a continuar en la lucha para ganar terreno también en los aspectos laborales”
QUÉ SE ENTIENDE POR HOMOFOBIA, TRANSFOBIA Y BIFOBIA?
“La homofobia es el término empleado para expresar el rechazo o discriminación de la cual son víctimas las personas que declaran su preferencia sexual que discrepa de los gustos que ha impuesto tanto la sociedad como la religión en este sentido.“ Por otro lado, la transfobia y la bifobia se definen como el miedo y la falta de aceptación que tienen algunas personas frente a los transgénero, los llamados bisexuales. En otras palabras, las personas que no se ajustan a los roles de género tradicionales. “Tanto la bisexualidad como la transexualidad tienden a ser comportamientos mucho menos aceptados a nivel social, a diferencia de la homosexualidad, lo que ha traído como consecuencia sufrimiento y una vida infeliz para todas estas personas.
Este día fue creado en el año 2004 y para lograrlo, fue necesario realizar un arduo trabajo de campañas, para que finalmente en el año 2005 se proclamara de forma definitiva. En esa oportunidad, más de 40 países alrededor del mundo participaron en un magno evento que fue transmitido por importantes medios de comunicación internacional.
Muchos países ven hoy la homosexualidad como un mal de la sociedad y en algunos de ellos, condenan duramente a las personas que realizan esta práctica hasta el punto de tener que ir a prisión e inclusive, hay lugares donde le son arrebatadas sus vidas.
Actualmente vivimos en una sociedad donde la discriminación por raza, religión o condición social está a la orden del día. A pesar de los años y los avances que ha alcanzado el hombre, siguen existiendo personas que condenan a sus semejantes por pensar, sentir y actuar de forma diferente a lo que tradicionalmente se ha establecido como norma de pensamiento y comportamiento social.
En este sentido, existe la necesidad de que cada vez se levanten más voces en todo el mundo para que esto no siga ocurriendo. Los seres humanos, por naturaleza nacen libres, por lo tanto deben gozar de derechos e igualdad, los cuales son inalienables.
En la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible establecido por la Organización de las Naciones Unidas, se espera la aprobación de políticas y leyes y de esta forma acabar de una vez por toda con la discriminación, que tantos problemas sociales ha causado a toda la humanidad.
Para celebrar este día tan importante, todos podemos aportar nuestro pequeño granito de arena para crear conciencia en la sociedad del respeto que tienen todas las personas con una condición o preferencia diferente al resto de la población y que se consideran heterosexuales.
Aunque en esta ocasión la conmemoración no se llevará a cabo de forma pública debido a la pandemia mundial conocida como coronavirus, si podemos, desde la comodidad de nuestros hogares levantar nuestra voz para reivindicar y hacer valer los derechos de todas las personas de la comunidad LGBT. La pandemia de COVID-19 ha puesto de manifiesto la discriminación estructural existente y lo que es aún peor, la profundización de la desigualdad en el acceso a derechos y a una vida libre de discriminación y violencia para las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI).
En este contexto, se torna necesario que los Estados adopten medidas concretas y eficaces para combatir la discriminación, el estigma y la violencia existente hacia las personas LGBTI, a fin de asegurar el acceso a la salud, la información, prevención y cuidado, trabajo, educación, vivienda y un nivel de vida adecuado que le asegure a esta comunidad el pleno desarrollo en igualdad de condiciones que a todas las personas.
La protección y promoción de los derechos de las personas LGBTI es un tema prioritario en la agenda de los países del MERCOSUR. En el año 2008, se creó el Grupo de Trabajo Diversidad Sexual, Identidad y Género en el marco de la Reunión de Altas Autoridades sobre Derechos Humanos del MERCOSUR (RAADH) que, en el 2010, se organizó como Grupo de Trabajo LGBT y, con posterioridad y en la actualidad, como Comisión Permanente LGBTI. Cuenta con el apoyo técnico del Instituto de Políticas Públicas en Derechos Humanos del MERCOSUR (IPPDH).