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sábado, 5 de julio de 2025
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También en Salto, noviembre se vivió como el mes de la concientización contra la violencia de género

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Con la Psic. Cecilia Casola

Pasó noviembre y Salto no estuvo ajeno a las campañas de sensibilización contra la violencia de género que se realizaron a lo largo de todo el mes y en distintos ámbitos, especialmente en torno al miércoles 25, fecha en que se celebró el Día Mundial de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Como lo informara oportunamente EL PUEBLO, la Plaza Treinta y Tres fue durante algunos días el principal escenario para la expresión mediante intervenciones artísticas, exhibición de cartelería con consignas alusivas, etc. Una de las imágenes más fuertes y llamativas fue la de los 16 pares de zapatos como símbolo de lo que dejaron quienes hace pocos meses murieron en Rocha como víctimas de este tipo de violencia. También en centros educativos se trabajó sobre el tema. En algunos de ellos, como el Liceo Nº 4 de Salto Nuevo o la UTU, las actividades estuvieron orientadas por la psicóloga Cecilia Casola, profesional que también se desempeña en el INAU desde donde viene trabajando intensamente, por ejemplo, en la necesidad de erradicar la violencia en el noviazgo. A fin de reflexionar sobre lo sucedido durante noviembre y sobre el tema en general, Cecilia Casola conversó con EL PUEBLO, explicando que «se intentó hacer sensibilización a muchos adolescentes para prevenir el femicidio; las chiquilinas pudieron ver que no se justifica ser golpeadas y que no es culpa de ellas».


-Se insiste generalmente con eso de la culpa, ¿verdad? Con que la culpa siempre recae en la mujer.
Porque socialmente a la mujer siempre se la culpa. Pero vienen las culpas hasta que si el nene no come es culpa de la mamá. Cargamos siempre con esas culpas de todas las cosas que se van dando. Si el otro se enoja es «porque vos me ponés así», esa es una frase común en las parejas, entonces te va afectando y te sentís insegura. Como que hice algo malo y por eso capaz me merezco un golpe, cuando en realidad nada justifica el golpe.
-¿Violencia en el noviazgo es un tema que preocupa porque lo ven como ya instaurado con fuerza en nuestra sociedad?
Sí, es un tema instaurado y no sé si hay tantas denuncias, porque es en la etapa en que más nos cuesta visibilizar esa violencia…
-¿Por qué?
Sobre todo porque te crían en el amor romántico, te crían en eso de que el hombre te va a venir a cuidar, entonces si te va a buscar todos los días al liceo es divino, y hasta a veces como padres decimos «la re cuida a mi hija, porque la lleva y la trae», y dejamos de ver a veces como padres que en realidad la está controlando y asfixiando y no le está permitiendo en una edad tan fundamental como la adolescencia, tener redes de amigos y amigas. ¡Ojo! esto del control también se da de novia a novio, hay adolescentes mujeres que también a veces ejercen un tipo de violencia en ese sentido hacia el hombre, que no quieren que vaya al fútbol o que se junte con amigos. Pero eso, a medida que va creciendo y la pareja se va afianzando, la mujer se va como desdibujando y el hombre es el que después que entran en una casa domina todo.
-Igualmente se habla más de la violencia del hombre a la mujer que al revés…
Y sí, porque es así, hay más, las denuncias mayoritarias son de violencia hacia la mujer. Es un problema de desigualdad, por eso a veces no se habla de violencia de género hacia el hombre, porque el hombre socialmente siempre está mejor catalogado y valorado. Todo lo que el hombre hace es porque lo logró, en cambio la mujer siempre tiene que remar y hasta justificar por qué llega. Incluso nosotras como mujeres siempre estamos como cuestionando cuando una mujer llega a algo, y eso nos debilita.
-En definitiva es una cuestión cultural que seguramente llevará mucho tiempo modificar.
Claro; cuando uno habla de género habla de qué es ser hombre y ser mujer en un lugar y tiempo histórico determinado, son construcciones. Por eso la importancia de sensibilizar para ir cambiando y que a los hijos los criemos en una igualdad.
-¿Notan que se ha avanzado últimamente en esa concientización?
Sí, se ven algunos cambios, pero hay frases como «te ayudé y colgué la ropa». La ropa no es solo de la mujer, o sea que no ayudó…el cambio también tendría que venir con esas frases, tenemos que seguir concientizando de que las cosas son de todos, los platos son de todos, o sea que frases como «ayudé a lavar los platos», no. Venimos mejorando sí, antes los padres ni tocaban a los bebés o los agarraban solo si estaban limpios, pero falta mucho todavía.
En el Liceo 4 trabajamos con un grupo de coro y con otro de tercer año. Llevé frases y analizamos qué veían del noviazgo, y salieron muchas cosas. Trabajamos canciones y salieron frases sobre el noviazgo. Veíamos cómo cantamos y naturalizamos mensajes como «sos mía» y otros de esa índole donde se ve el control hacia la mujer y la sexualización de la mujer…El grupo de coro seleccionó una canción que se llama «Aquí vamos», que habla de la ropa, de cómo por ser mujer parece que con la ropa provocamos, siendo que el hombre anda de short y las mujeres no lo andan atacando. En grupos de UTU hicimos un trabajo similar pero además ellos grabaron como un pequeño spot. Tanto la canción como el spot estaría bueno que la gente lo busque en Youtube.
-Una última consulta: los adolescentes hablan mucho de «lo tóxico» en el noviazgo. ¿Serían relaciones enfermizas?
Sí, ellos dicen mucho «el tóxico» o «la tóxica»…(risas), como el que controla mucho, el que no te deja respirar.
-Sin embargo siguen con esas relaciones como si no pudieran desprenderse…
Lo que pasa es que las relaciones de pareja son complejas y a veces hay dependencia, y cuando uno sufre violencia hay más dependencia. Una de las cosas que pierde una persona que sufre violencia es la autonomía, no poder tomar una decisión, más cuando a veces se viene de familias que son controladoras. Si vos aprendés a tomar decisiones y a elegir, sos menos vulnerable a sufrir acosos. Hay frases románticas que afectan, como «mi media naranja», cuando en realidad no somos la mitad de nada, somos personas enteras, completas, otra cosa es que tengas a otra persona para ir juntos hasta que dure la relación saludable, eso fantástico.

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