En el marco de la actividad anual Perspectiva de Precio 2023: estimación de precio en tambo y contexto internacional del Instituto Nacional de la Leche (INALE), el Ing. Agr. Gabriel Giudice, gerente del Área de Innovación y Desarrollo de INALE, y el economista Francisco Rostán, del Área de Información y Estudios Económicos, dieron una proyección de qué se puede esperar para el precio de la leche que recibirá el tambero en lo que resta del año en base a dos modelos.
Giudice realizó una estimación de precio en base a un modelo de simulación de probabilidades. En la edición del año 2022 ese modelo había manejado un escenario optimista para el precio de la leche de US$/l 0,45 y uno pesimista de US$ 0,41. El precio observado promedio que recibió el productor finalmente fue de US$ 0,42.
Este modelo tomó como base los precios a futuro de los lácteos y las relaciones de precios entre Uruguay y Oceanía. Esa paramétrica toma en cuenta la cotización de la leche en polvo entera en el mercado de futuros de la Bolsa de Nueva Zelanda.
El escenario pesimista para 2023 maneja un valor promedio para la leche en polvo entera de US$/t 3.121, el optimista en US$/t 3.849, con un promedio de US$/t 3.468.
Luego se realiza una correlación entre el precio de exportación de la leche en polvo entera de Uruguay y el precio que recibe el tambero. Ese modelo muestra que la industria podría vender la leche en polvo a un valor mínimo de US$/t 3.312 en el promedio de 2023 y a un máximo de US$/t 3.903.
Esto determina un precio piso estimado de la leche para el tambero de US$/l 0,34 y un techo de US$/l 0,38. Guidice precisó que este modelo “no considera el efecto Brasil” porque es un mercado que tiene un componente climático muy fuerte. “Lo de Nueva Zelanda es mucho más estable y previsible”, acotó.
El técnico del INALE advirtió que los valores que proyecta este modelo se acercan a los costos de producción, máxime si se tiene en cuenta el contexto actual de sequía. “Sin dudas que los US$ 0,34 serían una mala noticia, mientras que los US$ 0,38 no serían una mala noticia, pero tampoco excelente”, comentó.
El modelo serie de tiempos
A su turno, el economista Rostán presentó su estimación de precio en base al modelo serie de tiempos. Esta segunda metodología asume un modelo econométrico que toma en cuenta variables endógenas (precio de la leche del período anterior) y exógenas (precios de exportación de Oceanía y Europa y tipo de cambio).
Este modelo había proyectado tres escenarios de precio de leche para el productor uruguayo para 2022: uno de mínima de US$ 0,40 por litro, uno promedio de US$ 0,43 y un máximo de US$ 0,46 por litro. Finalmente, el precio observado promedio se ubicó en US$/l 0,42.
Para el promedio del año 2023, este modelo está proyectando un precio mínimo para el tambero de US$ 0,35, un techo de US$ 0,39 y un valor medio de US$ 0,37.
Esas proyecciones tienen como fuente los valores a futuro de la leche en polvo entera en la Bolsa de Nueva Zelanda y las previsiones sobre el tipo de cambio que hacen los expertos que responden la Encuesta de Expectativas del Banco Central del Uruguay (BCU).
“En los últimos seis años hemos visto que lo que marca el precio al productor es la cotización de la leche en polvo y cada vez hay una mayor producción que se exporta”, dijo Rostán.
La remisión lechera de febrero cayó un 9%; el precio medio fue de US$ 0,43
La remisión de leche a plantas industriales aceleró su caída en febrero como consecuencia de la fuerte sequía que hubo durante ese mes y que se extendió a buena parte de marzo en la cuenca lechera. De acuerdo a los datos que divulgó el INALE, la remisión de febrero totalizó 121 millones de litros, un volumen que estuvo 9,3% por debajo de igual mes del año pasado (unos 12 millones de litros menos). En enero la caída de la producción había sido bastante más moderada (-1,3%).
En el bimestre enero-febrero, la producción totalizó 278 millones de litros (-4,9%). En el año móvil a febrero, la remisión totalizó 2.075 millones y cae a una tasa del 1,9% versus los 12 meses previos.
Por su parte, el precio promedio para la remisión de febrero se ubicó en $ 16,90 en términos corrientes, un valor que estuvo 2% por debajo de igual mes del año pasado. En dólares, el valor medio de febrero se ubicó en US$ 0,43, en este caso con una mejora del 9% respecto a igual mes de 2022.
El kg promedio de sólidos de febrero se ubicó en $ 222,8, valor que estuvo 2% por debajo en la comparación interanual, según el INALE.
Quesos artesanales con ventas ágiles y precios que subieron.
Esta semana el mercado fue muy rápido con pocos vendedores y pocos compradores.
Las lluvias registradas en la zona de Ecilda Paullier han reverdecido los campos, con las gramíneas y pastos blancos que comenzaron a evolucionar, están “mejorado” dijo Eduardo Mesa.
Pero aún no se ha producido más leche lo que ha afectado el mercado de quesos sacándolo de su habitual tranquilidad. “Está faltando queso Colonia y los compradores están esperando a ver que va a pasar porque no alcanza”, comentó.
En cuanto a los valores hubo aumentos, en un mercado muy rápido con pocos vendedores y pocos compradores.
LOS VALORES.
Queso Colonia de primera calidad de $ 210 y $ 240. Queso Colonia de marca reconocida y estacionados, entre $ 250 y $ 290. Queso Colonia de segunda calidad entre $ 190 a $ 200.
Dambo y Quartirolo, de $ 220 a $ 240. Queso Sardo de $ 210 a $ 230. Quesos para rallar de $ 200 a $ 220. Magros con y sin sal de $ 220 a $ 250.
Mantecas caseras de $ 180 a $ 190.
Muzzarella común de $ 200 a $ 220. Muzzarella de marca impuesta entre $ 210 y $ 260. Roquefort nacional $ 420.
Quesitos Colonia de a kilo entre $ 220 y $ 240. Quesitos Colonia con gusto incorporado de $ 230 a $ 260. Quesos de cabra $ 480. Provolone parrillero, $ 230 a $ 250. (Fuente: en base a TodoElCampo)
Reducción en el costo de energía eléctrica para productores lecheros.
El decreto refiere a beneficios comerciales para productores lecheros y empresas o unidades productivas de la cadena láctea.
Para promover el apoyo a la cadena productiva láctea nacional y considerando la extensión de la emergencia agropecuaria declarada por el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) el Poder Ejecutivo, a través del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), firmó un decreto que instrumenta un programa de beneficios comerciales para productores lecheros y empresas o unidades productivas de la cadena láctea.
Se mantiene el beneficio que reduce el costo de energía eléctrica a la cadena productiva láctea durante el periodo comprendido entre enero y setiembre del año 2023, profundizándolo para aquellos productores con potencia contratada superior a 15 kW.