El dirigente frenteamplista Eduardo Varela, quien encabezó la Lista 1070 en las pasadas elecciones departamentales, confirmó a El Pueblo que asumirá como edil en la Junta Departamental de Salto a partir del 14 de julio. De esta manera, descarta ocupar la banca como diputado suplente del Frente Amplio en caso de ausencia de Álvaro Lima, optando por enfocarse plenamente en la política departamental.
“Tengo unas ganas bárbaras de ocupar esa banca”, aseguró Varela, quien considera que la nueva conformación de la Junta será especialmente relevante. A su entender, se avecinan discusiones profundas sobre temas clave para el departamento, en un escenario político marcado por la alternancia de partidos y la llegada de Carlos Albisu a la Intendencia.
Varela se comprometió a ser una oposición responsable y constructiva, abierta al diálogo y a la colaboración con el nuevo oficialismo, al que reconoció por el triunfo electoral. “Ganaron una elección, nos toca estar del otro lado y así es la política y la vida misma: ganar, perder, y saber perder para luego ganar”, expresó. En ese sentido, valoró este nuevo ciclo como una etapa de aprendizaje para él y su equipo político.
Consultado sobre el ambiente interno del Frente Amplio luego de la derrota, Varela sostuvo que observa una transición madura y respetuosa. “No estoy directamente involucrado, pero desde afuera veo que se está dando con mucha conducta, pensando en Salto por encima de todo”, afirmó, destacando también el tono de la reciente campaña electoral, que calificó como limpia y respetuosa entre los diversos sectores.
Además, subrayó la importancia de que la fuerza política de izquierda promueva una renovación interna real, dando lugar a nuevas figuras y liderazgos. “Si no lo hacemos, vamos a estar en un gran problema a futuro”, advirtió, dejando en claro que los desafíos del Frente Amplio no se limitan a la pérdida electoral, sino que también se juegan en su capacidad de renovarse y reorganizarse.
Su decisión de centrar su accionar político exclusivamente en el ámbito departamental, dejando de lado su rol como diputado suplente, también marca un movimiento significativo dentro del entramado frenteamplista. Si bien no lo expresa de forma explícita, esta elección puede leerse como un reposicionamiento político que lo distancia, al menos circunstancialmente, del sector Encuentro Frenteamplista (EnFa). En un contexto de renovación y reconfiguración interna del Frente Amplio, su presencia en la Junta puede abrirle un nuevo camino con identidad propia.