POR: JORGE PIGNATARO
Myriam Albisu Borrelli nació un día como el de hoy, 31 de enero, de un año que no importa. Porque sucede que ha dejado y sigue dejando vida en cada una de sus creaciones artísticas, que logran por lo tanto borrar toda cuantificación y límite de tiempo.
Hoy esta página de EL PUEBLO quiere homenajearla –no podía ser de otra forma- con su propia poesía. Y con el deseo de que sean de aquí en más, muchísimos cumpleaños más, porque el quehacer artístico de Myriam, y sus enseñanzas, y esa luz de buena gente que siempre esparce, son cosas necesarias, muy necesarias.

Antes de darle la palabra, recordamos estas líneas que escribíamos hace exactamente 12 años atrás: “La inclinación total hacia el arte que puede llegar a tener una persona, se hace evidente en la maestra Myriam Albisu cuando se comprueba la atracción que ha sentido a lo largo de su vida hacia la danza, la música, las artes escénicas, la literatura. Estudió guitarra, piano, teatro, canto, expresión corporal, títeres, mímica, por nombrar solamente algunas disciplinas. Su actividad en el ámbito cultural la llevó a ocupar durante algunos años el cargo de Directora de Cultura de la Intendencia de Salto. Como maestra se desempeñó en Crandon y en las Escuelas Nº 4, 8, 12 y 14; como profesora de Enseñanza Secundaria (Música y Literatura) en los liceos Nº 1 y 2; y en Formación Docente como profesora de Expresión rítmica y Expresión por el ritmo. Del Instituto de Formación Docente, además, fue Sub Directora y luego Directora…”.
Soy una nube en noche tormentosa
me enciendo en cada relámpago
y tiemblo al soltar cascadas de lluvia.
en la profunda oscuridad
retumban los truenos y yo
respondo con un pestañeo luminoso
y me deshago en agua
lleno las calles
los ríos
voy por los vidrios de las casas
y me hundo en la tierra.
Hago sonar ritmos alegres en los techos
y me vuelvo canturrón para el sueño,
lleno las acequias
colmo las fuentes
baño los árboles que se vuelven brillantes.
Puedo lograr el amor
y que la lejanía se vuelva cercanía
cuando el abrazo cálido y amoroso
me colma de agradecimiento y bendiciones
que me transmite el corazón.
EL PATIO
Es fuerte el viento
y el patio de llena de sombras confundidas
que luchan en el suelo y trepan las paredes
sueltas sus amarras, las hojas se entremezclan
y se amontonan, mientras los palillos en el alambre
se vuelven equilibristas
Los postigos de la ventana, se golpean.
La soledad espera en un rincón del patio
mientras entona una vieja canción.
El portón de rejas fuertemente cerrado
se abre lentamente con agudo chillido.
La soledad se va, ya nada queda.
¿DÓNDE ESTÁS?
Quisiera encontrarte
a la vuelta de una esquina o en la mesa de un café
dibujar en el vidrio empañado la inicial de tu nombre
sin saber quién sos
mirar hacia la puerta y verte entrar, aún sin rostro
solo una silueta viniendo hacia mí
ir a tu encuentro y quemarnos
atravesarte.
Irme… ¡sin saber quién fuiste!
LLOVIZNA
Rocío en los pétalos
lágrimas en las mejillas
sal en la boca
en el alma melancolía.
Una neblina suave invade todo
se desdibuja el paisaje
que se esconde en una tenue caricia de humo
como en los sueños.
La luz se hace cada vez más débil
y no estoy segura de si es ella
o soy yo…
