De arqueros y ejecutores: qué es lo prohibido y no prohibido
¿Cuál es el límite de lo que se dice? ¿Está bien? ¿Está permitido? Héctor Baldassi, ex árbitro argentino y hasta marzo integrante de la Comisión de Árbitros de Conmebol durante cuatro años, opinó para Olé sobre esta situación y fue contundente: “Esto es parte del folclore, es fútbol. ¿Qué tiene de malo decir ‘mirá que te como, estás cagado’? Esto es como cuando a uno le pegan un planchazo y se levanta puteando, insultando. Es el juego, es la calentura, es el momento”.

Al fin de cuentas, por estos lares salteños, observamos también lo sucedido en la serie de penales en el juego de Argentina y Colombia, para resolver quién de los dos avanzaba a la final de la Copa América de Selecciones. El golero albiceleste DAMIAN EMILIANO MARTÍNEZ, adquirió un rol central. Por el manejo de las palabras que impactaron en el equilibrio emocional de los ejecutores colombianos, en tanto lo suyo en el plano técnico no fue menos que vital: se atajó tres penales. Factor medular para el avance de Argentina a la instancia suprema.
La polémica se instaló: qué es lo prohibido y que es lo que no. Es entonces que OLÉ de Clarín abrió diálogo con Baldassi. Para EL PUEBLO, validez de rescate de algunos aportes que afloren de quien supo ser árbitro de primera línea de fuego.
ES TODO PARTE DEL SHOW
Baldassi subraya que «Al hablar también puede distraer al propio arquero. ¿Cómo no se va a poder? Es todo parte del show. No entiendo como hay algunos que dicen que tenían que expulsarlo o amonestarlo. En todo caso el árbitro, como hizo, lo puede advertir diciendo que no utilice algunas palabras subidas de tono, nada más. Siempre hay una interpretación del reglamento, como así también podemos ver que con el VAR siguen las polémicas.
Todo esto es parte de nuestra idiosincrasia, no busquemos el pelo en la leche, no hay ofensa.
El reglamento establece que se puede amonestar en caso de “distraer con palabras y comentarios a un adversario durante el juego o en reanudación”. Y fija la chance de roja en caso de “emplear lenguaje o actuar de modo ofensivo, insultante u humillante”. Para Baldassi, esto que pasó con Emiliano Martínez y los jugadores de Colombia no tiene nada que ver con eso sino que es parte del folclore.
LOS JUGADORES SE
LA BANCAN Y PUNTO
Obviamente, el límite es subjetivo. Algunos pueden considerar que las palabras utilizadas por el arquero fueron ofensivas, de hecho el árbitro venezolano en una parte de la definición le pidió que no utilizara ciertos términos. Pero no pasó de ahí y de hecho los jugadores colombianos se la bancaron como parte del juego psicológico.
Era una semifinal y se habló mucho entre los jugadores. Además, como no suele suceder en el fútbol de otros tiempos, hoy el hecho de que no haya gente en las cancha hace que se escuche muy nítidamente todo lo que se habla entre los protagonistas y entonces quedan más expuestas situaciones que antes no se hacían públicas.