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jueves, 6 de febrero de 2025
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Fusionar «B» con la «C»: de qué sirve y de qué no sirve

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En su momento, la decisión llegó para las Divisionales A y B de la Liga Salteña de Fútbol: la separación. Cada una jugando su propio torneo, con independencia de criterio en cada caso, y con la expectativa de que cada divisional aportara soluciones en medio de dudas existenciales y de acuerdo con la realidad dominante.

Con el tiempo, nunca se llevó a cabo un análisis a fondo sobre si aquel distanciamiento entre la «A» y la «B» implicó mejoras para la Liga Salteña en su conjunto. Cada uno atendió su juego y, con los años, se borró del mapa la posibilidad de una unificación. La opción de dar marcha atrás ya no parece tener sentido.

¿Qué es lo posible?

En ediciones anteriores de EL PUEBLO, se ha discutido la idea, por ahora en el aire, desde los neutrales: impulsar un ajuste en el Campeonato Salteño de la «A», de manera que a partir del año próximo comience en septiembre y finalice en marzo, cubriendo entre 6 y 7 meses. Sin embargo, aún no hay una definición clara al respecto.

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A su vez, en las últimas semanas ha surgido un nuevo objetivo que algunos se plantean y que ha comenzado a ganar atención: la fusión de las Divisionales «B» y «C». Esto implicaría la creación de una sola divisional con 24 equipos, tomando en cuenta que para el 2025 volverían a sumarse Florida y Paso del Bote. Pero, ¿es eso posible o simplemente impracticable?

El estudio de factibilidad

Este enfoque ha llegado a un punto tal que algunas Comisiones Directivas tanto de la «B» como de la «C» ya han puesto el tema sobre la mesa. Según información proporcionada a EL PUEBLO, hay dos preguntas clave: ¿de qué serviría y de qué no?

Mientras tanto, una propuesta empieza a tomar forma: establecer cuatro series de seis equipos cada una como punto de partida para ir afinando el sistema de disputa. Esto es solo un «borrador», y junto con la idea de fusionar las divisiones, surgen los cuestionamientos: ¿vale la pena o no?

Una pregunta sigue en el aire, capaz de encender el debate: ¿realmente se justifica una Liga con tres divisionales o tiene sentido explorar una transformación? En este caso, la fusión sería una verdadera transformación.

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