De Quiroga , Montiel Ballesteros y López Suarez a los nuevos talentos
Salto, tierra de narradores memorables, ha dado figuras fundamentales a la literatura infantil uruguaya. Desde Horacio Quiroga y Adolfo Montiel Ballesteros hasta Sergio López Suárez y nuevas voces emergentes, el relato para niños y jóvenes sigue vivo y en expansión.
La lectura en la infancia no solo es una herramienta educativa, sino también una fuente de imaginación, empatía y creatividad. Por eso, es clave destacar a los autores que han contribuido a formar ese universo literario dirigido a los más pequeños. En Uruguay, y en particular en el departamento de Salto, varios escritores han dejado huella en este campo.
HORACIO QUIROGA, EL PRECURSOR CON RAICES EN LA SELVA
El más célebre de todos es Horacio Quiroga, nacido en Salto en 1878. Aunque su obra trasciende los géneros y edades, su libro Cuentos de la selva (1918) es uno de los pilares de la literatura para niños y jóvenes en América Latina. Si bien los especialistas coinciden en que no fue escrita exclusivamente para el público infantil, su narrativa ha sido una puerta de entrada a la lectura para muchas generaciones.
ADOLFO MONTIEL BALLETEROS, EL ESCRITOR QUE LE HABLÓ A LOS NIÑOS
Otro pionero fue Adolfo Montiel Ballesteros (1888–1971), nacido en Paysandú pero criado cerca del arroyo Mataojo, en el interior de Salto. Poeta, dramaturgo y cuentista, publicó sus Fábulas en 1923, solo unos años después de Quiroga. Obras como Queguay: el niño indio y Don Quijote Grillo lo ubicaron como uno de los primeros escritores dedicados al público infantil. Diplomático y activista cultural, regresó en múltiples ocasiones a Salto para contar cuentos a niños en escuelas, dejando una marca entrañable en la memoria local.
MYRIAM ALBISU, UNA VOZ POÉTICA ENTRE RÍOS Y PALABRAS
Myriam Beatriz Albisu Borrelli (1937–2022) también merece un lugar central. Poeta, docente, gestora cultural y formadora, integró la Comisión Honoraria del Centro Cultural Horacio Quiroga y fue parte del grupo de amigos de Marosa di Giorgio. En el ámbito infantil, publicó Cabitos de naranja (1993) y Te doy mi palabra (2000), entre otras obras. Su poesía, ligada al río y al litoral, transmite sensibilidad y amor por el lenguaje, aportando una voz distintiva al universo de la infancia.
SERGIO LÓPEZ SUÁREZ, IMAGINACIÓN QUE TRASPASA LAS PAGIMAS
En la contemporaneidad, Sergio López Suárez (Salto, 1945) representa una de las figuras más reconocidas de la literatura infantil y juvenil uruguaya. Escritor, ilustrador y maestro, su novela Anina Yatay Salas no solo fue un éxito editorial, sino que llegó a las salas de cine como película animada, ganando reconocimiento internacional. López Suárez ha publicado más de treinta libros en Uruguay y el exterior (Chile, España, México), y su estilo combina humor, profundidad y ternura, haciendo dialogar texto e imagen con maestría. El país de los UH, fue tambié´n uno de sus mágicos libros…
NUEVAS GENERACIONES: LA PALABRA SIGUE CRECIENDO
Pero la literatura infantil salteña no se detiene ahí. Existen autores emergentes que, inspirados por estos referentes, comienzan a publicar sus propias obras. Algunos ya fueron discípulos de López Suárez en talleres de lectura y escritura, otros vienen del mundo de la docencia o del teatro. En sus textos se percibe la vitalidad de una tradición que se renueva, abordando temáticas actuales como la diversidad, el medioambiente o las emociones infantiles.
Desde las editoriales independientes hasta los proyectos educativos, hay un movimiento literario creciente que busca ampliar el acceso a la lectura en la infancia. Los talleres, ferias del libro y actividades comunitarias en escuelas y bibliotecas rurales demuestran que Salto no solo tiene pasado literario, sino también un presente inquieto y un futuro prometedor.
MERCEDES CALVO DE LAS QUE DAN PALABRA A LA INFANCIA
En la ciudad de Salto, a orillas del río Uruguay, germinó una constelación de voces literarias que ha iluminado, desde la poesía y la narrativa, el universo de la infancia. Entre ellas destaca Mercedes Calvo, maestra, narradora y poeta nacida en 1949, radicada desde hace años en México, donde continúa su labor como mediadora de lectura y promotora de la poesía para niños.
Su obra, profundamente lírica y evocadora, reivindica el poder de la palabra como un puente hacia la imaginación, la empatía y la formación crítica de los más pequeños. En «Los espejos de Anaclara», libro galardonado con el Premio Hispanoamericano de Poesía para Niños, despliega un universo simbólico en el que la infancia y el lenguaje se entrelazan con una belleza singular. En «Tomar la palabra», reflexiona sobre el lugar de la poesía en la escuela, no como adorno sino como herramienta formativa y sensible. Otros títulos como «Catalina y la bruja» o «La niña gorda» dan cuenta de su mirada aguda, sensible a los pliegues de la identidad, la memoria y la otredad.
Calvo no está sola en esta constelación creativa. Salto ha sido, silenciosamente, una cantera de escritores que han hecho de la literatura infantil y juvenil un territorio de exploración estética y compromiso cultural.
OTRAS VOCES DESTACADAS
Maestra Martha Cano: Escritora y periodista reconocida por su labor en la narrativa uruguaya, asociada también al universo infantil, “Pueblo Mágico”, “Papadita en el bosque encantado”.
«Pueblo mágico» es un libro de literatura infantil escrito por Martha Cano de Rodríguez. Fue publicado en Montevideo, Uruguay, por la editorial Libros para todos en 1990. También existe otra edición publicada por Amauta Editorial en 1991, con 72 páginas.
Fabio Guerra: Poeta y narrador, autor del premiado poemario «Mirá vos: 21 poemas raritos», y coautor de «Mamá es un movimiento». Su estilo fresco y original ha sido respaldado por IBBY Uruguay, validando su aporte a la poesía infantil.
María Luisa de Francesco: Nacida en Argentina pero radicada en Salto desde 1974, impulsora de la animación lectora y la literatura infantil. Autora de libros como «Luciano, un sapo lírico» o «Instrucciones para domesticar un dragón», combina humor, fantasía y un compromiso formativo sostenido por más de tres décadas de trabajo en bibliotecas, cárceles y talleres comunitarios.
Marcos Llemes (Salto, 1992): Representa a una nueva generación de escritores uruguayos. Su libro «Bruno y la nube con forma de dragón», premiado por el MEC y galardonado con el Bartolomé Hidalgo, muestra una narrativa ágil y sensible, orientada a los afectos, las emociones y la imaginación de los jóvenes lectores.
La infancia como territorio poético
En estos autores, la literatura infantil no se reduce al didactismo ni al entretenimiento. Se trata, más bien, de una forma de resistencia poética: una manera de nombrar el mundo, de darle cuerpo a lo invisible, de invitar a los niños a pensar, soñar y sentir con profundidad. Desde Salto —esa ciudad que parece mirar siempre hacia el río— emergen voces que confirman que la literatura para la infancia es también literatura mayor.
DECIMOS AL MARCHAR…
Promover la lectura en la infancia es también proteger el imaginario colectivo de una comunidad. Los autores salteños, desde Quiroga hasta los más jóvenes, han sabido hablarle a las niñas y niños con respeto, belleza y autenticidad. Hoy, esa conversación sigue, con nuevos libros que esperan ser descubiertos y compartidos.
