Enterados que la coterránea Sofía Remedi había dado a conocer su primera novela en Montevideo, donde reside, EL PUEBLO se interesó por conocer más al respecto. En contacto con la autora, esta contó que nació en Salto y a los 18 años, como tantos otros estudiantes de interior del país, se mudó a Montevideo para comenzar una carrera universitaria en la UDELAR. Primero estudió la Licenciatura en Nutrición, y una vez egresada, completó la Tecnicatura en Comunicación Social (orientada a la publicidad).
Su pasión por la creatividad “siempre ha estado presente, ya sea en la rama literaria, en la creación de juegos de mesa vinculados con el fútbol femenino, así como en el audiovisual, habiendo realizado varios documentales en forma independiente y autogestionada”.
Respecto a la novela “Puntos de encuentro”, dijo que “fue concebida en el año 2012 pero tuvo que esperar casi diez años para que una editorial, independiente en este caso, le diera el sí y aceptara los riesgos de una publicación. En Uruguay existen decenas de editoriales y centenas de autores por lo que abrirse camino en el rubro no es para nada sencillo y claramente la autopublicación, la inversión del propio bolsillo para imprimir una novela, no siempre está dentro de las posibilidades de todos”.
¿De qué trata la obra?
Mónica, Fabiana, Tamara, Javier y Rosario viven o llegan a Montevideo por estudio, trabajo o familia. En distintos momentos de sus vidas, sus caminos se cruzan y esos puntos de encuentro, simples, concretos, son determinantes para su futuro. En la novela, a lo largo de sus páginas y de los personajes tan distintos, se desarrollan temas como la amistad, la aceptación del amor, los vínculos tóxicos, violencia de género, la sexualidad, «el nido vacío», los estudiantes del interior en la capital, entre otros. A su vez, la novela se divide en dos épocas bien diferenciadas, en donde la comunicación no era tan accesible y las personas se encontraban y desencontraban cuando el azar o los teléfonos fijos, así lo permitían. Hoy con tanta tecnología la comunicación debería ser más fácil y fluida, pero cuando se trata del amor y de los vínculos amorosos, hablar no siempre es sinónimo de entenderse. Mónica enamorada de Rosario, en los años 90, teme hasta hoy día anunciar su homosexualidad; Fabiana, profesora y médica, divorciada y con dos hijos a cargo, se enamora de Javier, un joven mujeriego que nunca formalizó una relación amorosa. Tamara, una joven rebelde, la oveja negra de la familia, y quien todavía lidia con la ruptura del vínculo con su último novio, conoce a Mauricio, quien le brinda el tipo de relación que necesita para sanar, pero para la cual no está preparada. Así se entreteje esta novela, que comenzó a gestarse en tiempos universitarios de la autora y con la inspiración tomada de la película Crash, vidas cruzadas, la cual marcó no solo su pasión por la escritura, sino también en la pasión por el cine y el mostrar vidas reales y cercanas a la de cualquier persona.