El 30 de agosto, en el marco del aniversario del Museo Ma. Irene Olarreaga Gallino, la Comisión de este prestigioso centro de arte en conjunto con la Intendencia de Salto organizaron la presentación de un video conformado por el trabajo de ocho artistas de Salto: Elsa Trolio, Alfredo López, Carlos Guinovart, Federico Arnaud, Dita Carbone, Pablo Sánchez, Mario Perillo y Carolina Cunha.

Se hizo asimismo una pequeña exhibición de trabajos de los mencionados artistas en la Sala Carmelo de Arzadum.
No sé si era esa la intención, pero confieso que lo tomé como una especie de selección de lo mejor de las artes visuales de nuestro medio actualmente. Y a decir verdad, coincido. No tendría nada que argumentar en contra del nivel de cada uno de estos salteños. Por mi formación, más acostumbrado a la literatura, diría que me pareció una antología. Está bien…Pero después de haberlo razonado varios días, no puedo dejar de expresar públicamente mi sorpresa por no encontrar allí la presencia de Aldo Franzoni ni de Álvaro Zunini.
Sé que podrá decirse: “no pueden estar todos”, o “es justamente una selección y algunos quedarán afuera”, y frases similares. Pero en el caso de los dos artistas de los que hablo, me resulta demasiado grande la omisión.
Por un lado, la última muestra (Retrospectiva) de Franzoni, presentada allí mismo, en el mismo Museo Olarreaga Gallino en el mes de junio, que concentró a un número inusitado de público y despertó los más destacados elogios de ese mismo público y de críticos de arte altamente calificados, habla por sí sola y me exime de explicar más mi posición de asombro y desconcierto. Por otra parte, ¿hay en el Dibujo un salteño de mayor trascendencia internacional que Álvaro Zunini? Pienso que no. ¿Y entonces? En fin…La ausencia de ambos me resulta incomprensible.