Mucho se habla de contaminación, tratamiento adecuado de la basura, etc. Alguien planteaba ayer algo que tiene que ver con la contaminación pero de otra forma. Hablaba de lo sonoro.
«Me preocupa la contaminación acústica que hay en Salto y no veo quién controle», decía una lectora de este diario que se comunicó con nuestra redacción. Narró además que «esta semana pararon frente a mi casa dos móviles de grupos políticos y tuve que salir a decirles que bajaran el volumen porque no se podía ni hablar».
Teniendo en cuenta todo lo que se viene dentro de la campaña política, coincidimos con esta persona en que debería controlarse más; en realidad, habría que tener más sentido común, ser más respetuosos y no serían necesario los controles, pero… en fin.
Vecinos de la avenida Reyles y zonas cercanas están contentos con la iluminación recientemente inaugurada. Tienen la esperanza -decían- que esto ayude a mejorar no solamente el tránsito sino también los problemas de inseguridad que son frecuentes en el lugar.
Malestar de mucha gente se escuchó por un enorme pozo en la calle que hay en Invernizzi casi avenida Barbieri. Sobre todo los motociclistas tendrán que tener mucho cuidado mientras no se repare.
