Los delitos contra la propiedad privada se vuelven cada vez más frecuentes y en buena medida dan razón a la preocupación de las autoridades respecto a esta realidad.
Desde un celular que fue “manoteado” en un comercio, hasta el robo de diversos y costosos efectos en talleres, por ejemplo.
Una de las denuncias fue formulada por el propietario de un comercio ubicado en Industria y Boycuá, donde su propietario, al proceder a abrir el mismo en horas de la mañana, se encontró con una sorpresa: la banderola del frente estaba rota.
Al ingresar verificó la falta de una balanza eléctrica para 15 kilos, 10 unidades de desodorante en aerosol, una chaira y un cuchillo grande, cuatro cajas de tinta para el pelo, varios cartones de cigarrillos, $ 500 en monedas y $ 200 en papel.
EN UN GALPON
DE TORNERIA
Mientras tanto, también se denunció el robo perpetrado en el galpón de una tornería ubicada en calle Ramírez al 600.
De acuerdo a lo señalado por su propietario, los delincuentes ingresaron al recinto a través de una banderola de 1.20 por 0,40, para posteriormente salir por la puerta del galpón, utilizando las llaves de la puerta que se encontraban en el interior del local.
De allí se llevaron una amoladora Staller grande, una pistola de aluminio encastre de media pulgada y una de ¾, una pistola neumática, una eléctrica, y un radiograbador con dos parlantes.
El damnificado evaluó el monto del perjuicio provocado por el robo en una suma que se sitúa entre los $ 45.000 y $ 50.000.
Por su parte, delincuentes ingresaron a una finca de calle Zelmar Michelini al 1500. Allí robaron una desmalezadora con guadaña blanca que se encontraba sobre una camioneta estacionada en el patio de la casa.
Robaron en un comercio y en un taller de tornería
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