Con una hermosa fiesta ofrecida por sus padres Carlos y Mercedes festejó sus quince años la jovencita Mercedes Raquel Nieto López.
La Chacra Le Park fue el lugar de encuentro de familiares y amigos con los cuales compartieron una espléndida noche de fiesta.
Cerca de las 23 hr. mientras se escuchaba el tema «Ángel» interpretado por el grupo Gregory llegó la agasajada, siendo recibida por su hermano Pablo Sebastián, este la condujo hasta donde esperaban sus padres y los abuelos Beto Nieto, Zulma Quintana y Juana Curbelo, también estaba la madrina Silvia Nieto.
La jovencita realzó su prestancia vistiendo fino modelo de fiesta interpretado en organza blanco, de amplia falda con el zócalo en ondas delicadamente bordado en hilos de seda y pailletes, sobre falda abierta al frente con igual detalle en la terminación, se repetía en el borde del escote de línea corset acordonado el frente con cintas plateadas, en el peinado lució tiara de strass.
En el parque con iluminación destacada recibían a los invitados dos jóvenes haciendo malabarismo con fuego y vestimenta de color blanco y lavanda, en el recibidor estaba el cuadro destinado a recoger las firmas y mensajes, realizado en plateado y negro, del otro lado había una gigantografía acompañada de artístico arreglo con varas de sauce eléctrico, cañas y otras ramas patinadas de plateado decorados con espejitos bellamente iluminado con luces de colores cambiantes.
Llamó la atención la decoración del salón en los colores lavanda y plateado, las mesas lucían al medio torre de espejo en cuyo vértice se apoyaba un hada de alas abiertas en los colores de la fiesta, los jóvenes disfrutaron de un sector con varios livings blancos y almohadones en composée con los colores antes mencionados, acompañaban mesas bajas decoradas con potiches de vidrio reteniendo velones encendidos, dispersos habían pétalos de flores, en otras mesas se dispusieron tres tubos de altura irregular con rosas blancas y teñidas, completaba este arreglo cortinas de caireles transparentes y espejados. El salón fue decorado con telas enlazadas en los dos colores, rodeaban las columnas internamente iluminadas, al frente habían altos suspiros con varas retorcidas de sauce plateado y flores de liliums.
La mesa principal portaba la torta de cumpleaños de tres pisos decorados en blanco y negro con los símbolos del Yin y Yang junto a cascada de flores naturales de color lila suave, en un costado de la mesa se repetían las dos transparencias, del lado contrario estaba el centro de la felicidad elaborado en fanal cúbico sobre base de espejo, rodeaban quince pequeñas velitas y al frente potiches con rosas.
Llamó la atención los juegos inflables destinado para regocijo de los más pequeños, las notas de un vals marcó el inicio a la danza, con su papá en primer lugar, su hermano, otros familiares y amigos, posteriormente ritmos de moda inundó la sala dando inicio al baile que se prolongó por toda la madrugada, teniendo su punto más alto de alegría cuando se repartió el cotillón, juegos de espuma, papelitos y máquina de burbujas.
Muchas elegantes se dieron cita esta noche, entre ellas recordamos a su mamá, lució solero largo de satén rojo borgoña, el corsage revestido de gas que en un hombro se resolvía en panel suelto, también de gasa drapeada era la faja ancha que aprisionaba el talle.
Para acompañar a la familia viajaron familiares de Montevideo y Concordia (R.A.). Recibió múltiples y finos obsequios que perduran en el recuerdo de este día feliz.
