La alerta por lo sucedido en Argentina, donde al parecer un extremista intentó asesinar a la vice presidente de la Argentina.
Y conste que no discriminamos a nadie porque creemos que lo que está en juego es el sistema democrático. Vale decir aquel que respeta la opinión popular más allá de que sea la de mi preferencia o no. Debe tener una opinión clara y contundente.
Un intento criminal de estos atenta contra todo lo que es racional, lo que se basa en la convicción y el razonamiento. Lo que deja sin duda bajo sospecha es la veracidad del hecho o su simulación y de allí que no comprendemos como un sistema de seguridad, puede arruinar un elemento esencial para la investigación del hecho.
No se puede omitir que este atentado se produce cuando se conoció un pedido fiscal de 12 años de cárcel para la vicepresidenta por un tema de corrupción.
El tema es que no comprendemos como pudo “recetearse” (o borrar los contactos del celular incautado al autor del hecho), sabiendo que puede ser un elemento esencial para la aclaración del hecho, sobre todo para saber si actuó sólo, si tiene compinches, si integra algún grupo o no.
Es una de las novedades conocidas en las últimas horas, lo que no hace otra cosa que enturbiar las aguas y echar más sombras sobre el hecho.
No tenemos por el momento ningún elemento para desconfiar de la veracidad de los hechos y de allí que le hayamos dado a la vicepresidenta todo nuestro respaldo, nuestra adhesión, pero jamás aceptaremos que haya elementos que enturbien la veracidad de los hechos.
Mientras no haya prueba en contrario esta es nuestra posición.
No nos cansaremos de repetir que hemos conocido y asistido a todo tipo de hechos en estos casos.
Desde los cargos harto dudosos que le fueron adjudicados a Luis Inácio “Lula” da Silva en Brasil, hasta los casos comprobados de corrupción en Colombia.
No se puede ignorar que un hecho “preparado” es también la mejor forma de cambiar el centro de discusión. Obviamente que mientras no se pruebe debidamente este alcance para nosotros no hay elementos para sospechar siquiera.
Por el momento que quede muy claro. Estos hechos de violencia extrema serán siempre condenables.
A.R.D.
