Marcelo Faccini
Tras las nuevas medidas adoptadas por los gobiernos nacional y departamental respecto a la lucha contra el avance del coronavirus, una de ellas en particular, la del cierre de los centros termales, generó un eminente descontento entre los actores del sector turístico.
En diálogo con EL PUEBLO uno de los comerciantes y empresario de Termas del Daymán, Marcelo Faccini, manifestó el desconcierto ante una media que consideran «discriminatoria», procediendo a manifestarse en la cabecera del Puente Daymán, cortando la circulación de Ruta 3 en los accesos a nuestro departamento.
«NO SE QUEBRÓ UNA VARA POR NOSOTROS»
Se han planteado varias movilizaciones; si bien uno es la cara visible en todo este tema, detrás nuestro hay mucha gente, comerciantes y empresarios de Termas del Daymán, de todos los rubros: gastronomía, hotelería, artesanos, y mucha gente de Salto, también. La verdad que estamos ante una problemática que afecta a toda la ciudad. Y la verdad que ahora, escuchando las manifestaciones del Sub Secretario del Ministerio de Turismo, nos queda bastante claro que, es un decreto a nivel del Ministerio de Turismo, si bien nosotros creíamos que era a nivel de la Intendencia, tampoco la Intendencia quebró una vara por nosotros.
Nosotros estamos agotando todos los medios, pero, los plazos se nos están cerrando. Ya ha bajado a más del 70% las reservas, el daño que se le ha hecho al destino turístico es y va a ser irreparable, me animo a decirlo. Porque, ya no tuvimos el año pasado la Semana de Turismo, y ahora tampoco, siendo que es el fuerte nuestro. Han caído las reservas y la gente que no viene acá se va para el Sur. Entonces creemos que, el mensaje que se está dando, es un mensaje absolutamente equivocado: «no vengan a termas que hay contagios, váyanse para el Este que está todo bien». Cuando, en realidad, es todo lo contrario. Acá se está llevando un estricto protocolo por parte de la hotelería, como cuando se va a la puerta de las termas, también, se toma la temperatura, se hace el monitoreo, se está en las burbujas; tenemos tres hectáreas de parque, con un aforo de unas 800 personas; después tenemos a Agua Clara con un aforo de unas 300 personas, y Acuamanía con un aforo de unas 250 personas, así que estamos hablando que, no llegamos a las 1.500 personas. Por lo tanto, en un lugar donde estamos acostumbrados los Viernes Santos a tener alrededor de 7.000 personas, y lo digo porque hace 30 años trabajo en Termas del Daymán, vemos que hoy, se cuenta con el 10% del aforo original.
Dicho sea de paso, además, la zona termal está preparada para recibir a los turistas, habiendo sido la primera zona en contar con un protocolo aprobado por científicos, que nosotros mismos fuimos a buscarlo cuando se abrió termas allá por el mes de julio del año pasado.
«NOS CORTARON LOS BRAZOS»
Nuestro descontento es el que está a la vista por razones que están a la vista. Que nos cortaron los brazos; que no nos dejan trabajar; que el único destino que está cerrado es termas, y reitero, viendo las declaraciones del Sub Secretario del Ministerio de Turismo, nos queda claro que, esto es algo que proviene del Ministerio, que es el que está poniendo las trabas, siendo que creíamos que quien lo hacía era la Intendencia de Salto, la cual, tampoco salió a refutar eso, lo que nos parece raro, porque Lima hace una semana sostenía que era un destino seguro y, ahora, con el acatamiento de un decreto que consideramos arbitrario, anticonstitucional porque se mete con la parte privada, y direccionado y malintencionado, solamente, hacia y, con la parte termal. También, en un momento el intendente dijo estar alineado con la Intendencia de Paysandú, y no era así, ya que nos comunicamos con la gente de Guaviyú, y los hoteles privados de Paysandú que tienen agua termal, están abiertos. Dicho sea de paso, Los Naranjos que se encuentra pasando el Puente Daymán, que corresponde a Paysandú, está abierto. Lo único que se cerró, fueron los emprendimientos y parques termales de Salto. Entonces, el mal mensaje que se da es: «no vayas a Salto». No entendemos. Antes, éramos un destino salud, termas siempre se caracterizó por ser un destino salud, un destino que tiene 60 años, que tiene el agua monitoreada de mejor manera que en cualquier parte del país. Por lo tanto, el mensaje, es totalmente equívoco. O sea, podés ir a un hotel con piscina climatizada al Este y meter en una piscina de 6 por 3 a 40 personas, y no podés venir a Termas del Daymán a un parque que tiene tres hectáreas. Nos parece que es una cosa sin sentido. Estamos enviando mensajes erróneos y no vemos que nadie esté defendiendo a un destino de 60 años, cuando nos están cortando los brazos, nos están dejando fuera de un derecho inalienable como es el derecho al trabajo, y nos sentimos profundamente perjudicados. Creemos ser rehenes de una guerra que hay entre el Ministerio de Turismo y la Intendencia de Salto, siendo ese el tema de fondo, un tema político.