La Redota: «heroica caravana que fue sin dudas el episodio más interesante de toda nuestra historia», dijo Ofelia Piegas

Actividades por la 23ª Recreación comienzan hoy en el Ateneo

En la noche de hoy viernes, a la hora 20:30 en el Ateneo Municipal, se inician las actividades de una nueva edición (la número 23) de la Recreación de la Redota. Hace algunos días, en el acto de lanzamiento de las actividades, la profesora Ofelia Piegas, con la claridad y solidez que la caracterizan pronunció el siguiente discurso, al que únicamente hemos agregado subtítulos. Comenzó diciendo que «este hecho de la Redota que la Asociación de Amigos del Patrimonio Histórico llevamos a cabo cada año tiene muchas puntas. No es solamente la recordación del hecho en sí, con su enorme importancia, sino que fue el momento más importante de toda nuestra historia, porque nace aquí el sentido de la orientalidad y la forma de nacionalidad que nos diferencia del resto del antiguo Virreinato del Río de la Plata y luego de las naciones de los estados unidos del Río de la Plata».

La «cultura totalmente diferente» del norte del país
«Tiene muchas puntas porque hay temas que deben ser atacados de entrada. Nosotros teníamos al norte del Río Negro una cultura muy distinta del resto de la Banda Oriental, que era todavía muy joven en esa época, porque Montevideo había sido fundada en 1730 y nosotros estamos hablando de fines de ese siglo y principios del XIX. Se había formado aquí al norte una especie de cultura muy particular en la cual incidieron elementos que no se daban en el sur, como es por ejemplo la presencia del guaraní, evadido o abandonado desgraciadamente de esa experiencia preciosa que fueron las misiones jesuíticas, y que pobló toda esta región. Por otro lado tenemos la presencia del charrúa, que no osaba pasar el Río Negro pero tenía su presencia desde la zona que hoy Brasil tiene del sur de Río Grande del Sur y lo que era la Banda Oriental, que no era provincia todavía. Por otro lado la presión del portugués, que también era litoraleño, era fronterizo, pero nos daba una cantidad de elementos que se iban sumando a los anteriores para formar una cultura diferente. Ese hombre malentretenido que huyendo en general de la ley estaba presente en toda esta zona, fue adaptándose a la forma de vivir de los indígenas. Por eso, eso que va a terminar siendo el gaucho, fue primero el hombre malentretenido, como dije, y siguió siendo gauderio, o sea hombre suelto, ya gauchesco pero medio ladrón digamos, persona no establecida. Siguió siendo changador cuando la codicia de los estancieros de las provincias argentinas venía a saquear nuestro ganado para comercializar sus cueros, y terminó siendo el gaucho del que nosotros tenemos la idea en las huestes de Artigas, en el movimiento revolucionario. En ese principio de nuestra historia tenemos al norte del Río Negro una cultura totalmente diferente y es la que va a estar en su mayoría presente en ese éxodo del Pueblo Oriental. Había algunos elementos urbanos de gente que se había ido de Montevideo y se había sumado a esta revolución, pero en general fue el gaucho, ese que había tenido una presencia tan importante en la Batalla de Las Piedras y que se había envalentonado y había podido con el poderío español al que odiaba, al que llamaba despreciativamente ‘el godo’, un término peyorativo, porque los godos en Europa habían sido los que avanzaron y deshicieron todo el imperio romano. Ese gaucho fue la presencia más interesante que tuvo la Redota».
El tema del mestizaje
«Todavía hay un tema que no se ataca nunca y que sin embargo es importantísimo, que es el problema del mestizaje. Estos gauchos prácticamente eran mestizos, porque para ese hombre que había huido al norte del Río Negro, no había mujeres blancas, había mujeres guaraníes, sobre todo después de la expansión o del abandono de las misiones orientales y occidentales. Entonces, en una primera generación ya tenemos el mestizaje; y con una característica muy interesante, que es que en general al niño que nace de esa cópula lo cría la madre, le va dando todas sus características, su escatología, sus pensamientos que hoy llamamos supersticiosos y que todavía permanecen en la campaña. Quiere decir que el personaje más interesante de la Redota es el mestizo. Un mestizaje que va aparentemente desapareciendo cuando más tarde la inmigración europea modifica la sucesión de la población, pero que tiene un fuerte sentido de mestizaje. Todavía los estudiosos de antropología encuentran que hay lugares como Tacuarembó, donde hay casi un 48 % de población que en su ADN tiene elementos guaraníes particulares, aunque a nosotros nos gusta llamarnos charrúas, pero el charrúa tiene una mínima incidencia sobre la población».
El «censo» hecho en el Río Daymán
«Tenemos un material precioso que es el censo que hizo Artigas en el Daymán. Una especie de recuento de las personas que cruzaron el Daymán y que nos deja esas más de 4.300 personas censadas con sus apellidos, porque es la familia formada por el matrimonio con sus hijos varones, aunque pocos ellos, porque casi todos están formando el ejército, ejército es una forma de decir, porque prácticamente no sabían manejar las armas. Luego los hijos varones menores, luego las mujeres y luego los esclavos y las esclavas. Tenemos un panorama riquísimo para estudiar sociológicamente lo que significó este documento, que es a mi entender lo más interesante y directo que nos tocó de Artigas, porque tiene su firma, y todavía agrega más de 100 carretas y caminantes que todavía no habían llegado al Daymán y no habían sido anotados.
Este es el panorama de esta heroica caravana de personas, de esta contagiosa ansia de libertad, ese enfrentar al destino en busca de la libertad.
Eso es lo que representamos año a año con esta actividad y vamos agregando elementos para que esta sociedad del olvido tenga en cuenta lo que fue sin dudas el episodio más interesante de toda nuestra historia».