Son cuatro de los pretendientes.
Los números no precisamente establecen lo contrario.
Posición inmejorable para que la ambición se doblegue. Para que persista.
Los puntajes en cada uno de los cuatro casos, delatan la urgencia. Con Progreso y Saladero primero, con Ceibal-Gladiador después. Por eso, la ardiente tarde del Parque Rufino Araújo.
La misión no se oculta, en función de esas mismas urgencias. Pero con un dato que no es menor: los cuatro llegan a la instancia después de perder. El hecho es ese.
Por eso, cuenta ahora el imperativo de victoria, desde el momento que están pendientes la quinta y sexta casilla, de cara a la tercera y definitiva rueda del Campeonato Salteño en la “A”.
La misión no se oculta, porque a falta de 9 puntos, ninguno de los cuatro puede dudar. Hay que tener en cuenta que River Plate ganando retornó a la chance misma de avance. Por lo tanto, nada resuelto y ese especial universo de la intriga que pasan a compartir. Saladero acaso, puede descubrir una superior perspectiva en relación a Progreso, mientras en Ceibal-Gladiador es capaz de brotar la duda mayor. Gladiador no fue polo opositor para Salto Uruguay y Ceibal padeció a Universitario. Queda en claro que la misión no se oculta. Y rige para los cuatro.