
Los seres humanos podemos llegar a ser propensos a sufrir del corazón de un momento a otro. Por tal motivo es que hoy, las preguntas no se hacen esperar.
Cuáles son sus funciones, qué tipo de situaciones llegan a incomodarlo y cómo podemos hacer para cuidarlo concienzudamente más.
Dialogamos con el Dr. Carlos Gabrielli para que nos explique, sobre cómo lograr que nuestro órgano más importante, funcione a las mil maravillas.
¿A qué le llamamos un ataque al corazón?
Cuando hablamos de un ataque al corazón, hablamos de una persona mayor a los cuarenta años, lo asociamos a infarto, a accidentes cerebrales, ya que el corazón y el cerebro, tienen las mismas circulaciones.
Pueden pasar en este caso, dos cosas: un ataque cardíaco y cardiovascular. Dos de los más frecuentes.
Es por ello que debemos conocer las enfermedades del corazón y cuáles son las del cerebro, para poder prevenir.
No solo tenemos que escuchar al médico, sino entender cuál es la enfermedad y cómo se comporta.
Porque si tenemos el enemigo adentro y no lo conocemos, nos puede hacer una mala pasada.
Y si sabemos que podemos llegar a tener un problema cardíaco o cerebral, lo podemos atender mucho mejor.
Ataque cardíaco y cerebral (enfermedades cardiovasculares)
Son las que se llevan en mayor número, de complicaciones mortales.
Sobre todo desde los cuarenta.
¿Cómo se anuncian?
Pueden anunciarse o pueden ser bruscas. Pero no tenemos que esperar a que sea un accidente grave, sino que debemos atender a los signos que nos están diciendo que los podemos llegar a tener.
No esperar a tener un infarto, una pérdida de conocimiento, una fatiga.
Que nos avise el organismo y nosotros no le demos importancia.
Debemos hacerle caso y consultar.
Es el médico quien define si tiene una amenaza o tiene riesgo de “un ataque”, como le llama la gente. Para eso el médico actúa y decide qué hacer en esa situación.
Y otra manifestación es la muerte brusca.
¿Cuándo es el momento preciso para consultar?
Muchas veces pasa después de determinada edad, que la persona no consulta, entonces esta no sabe ni siquiera qué presión tiene. O se trata mal la presión.
Hay que actuar, previniendo los factores de riesgo y cuando están presente, tratándolos.
A veces pueden ser factores corregibles.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
Presión arterial, diabetes, tabaquismo, colesterol, la vida sedentaria y la obesidad.
Es por ello que pedimos que después de una determinada edad, tiene que estudiarse cada persona, para hacerle una prevención primaria.
Le llamamos atención primaria, para tratarlo cuando le viene un accidente cardíaco cerebral.
Ya cuando le da un accidente cardíaco cerebral, se llama prevención secundaria. Por lo tanto es importante en la atención primaria, el control de presión, para saber si tiene antecedentes familiares cardíacos, diabetes o se fuma en la familia.
Es por ello que tenemos que verlo, en general los médicos y los cardiólogos tratando de prevenirle el accidente cardíaco y cerebral, antes que le dé el ataque. Ese es el sistema de salud hoy, tratando de prevenir enfermedades.
¿Qué pasa luego del ataque?
Va a tener un corazón o un cerebro dañado.
¿Qué llega a sentir la persona cuando le está por dar “el ataque”?
Lo habitual es un dolor en el pecho, en los hombros, en el cuello y se traslada hacia los brazos.
Es típico que le venga en un esfuerzo, una situación de estrés, o que toma frío. Muchas veces da falta de aire. Y es similar al dolor cardíaco.
Es una amenaza de infarto, pero podemos decir que de mucho riesgo.
¿Cuál es la diferencia de esa sensación si se encuentra caminando?
No es lo mismo que vaya caminando y subiendo un repecho como de diez cuadras a que camine en la vereda tranquilo.
Porque muchas veces la gente sale a caminar y luego cuenta que sube un repecho y “me viene el dolor”. Piensa ¿si se detiene o disminuye la velocidad?
Eso quiere decir que el corazón está sintiendo el esfuerzo. Pero a veces, es levantando un peso, corriendo, o sale a caminar, hace mucho frío y empieza el dolor.
Quiere decir que el dolor es típico de la reacción y muchas veces no es tan así, por ello es el médico quien tiene que definir.
¿Cuál es actualmente la patología más consultada respecto al corazón?
Esta muy de moda la aneurisma de aorta.
¿Qué es la aorta?
Es una arteria que sale del corazón y lleva sangre a todo el organismo.
Baja del tórax para atrás de la columna y llega a los miembros, se ramifica, también va al cerebro.
Pero esa aorta, si está delicada y se fisura, es un sufrimiento, porque se está rompiendo. Da mucho dolor en la espalda.
¿Por qué se rompe?
Si tiene presión alta, si es una persona hipertensa, tratada o no, y dependiendo de la edad. Los órganos se van envejeciendo y debilitando.
Así como la piel, los músculos, las manos, los órganos se van deteriorando con la edad, pero cuando hay factores de riesgo, se acelera este proceso.
¿Tiene alguna solución la fisura de la aorta?
Si es tratada a tiempo, puede llegar a tener, pero hay solución.
Es según la edad de la persona, pero de todas formas la tecnología, cada vez, avanza más.
Si pensamos en una cámara de bicicleta, que es elástica y le ponemos mucho aire, se rompe. Pasa eso, porque está la cámara envejecida, no aguanta la presión.
Está endurecida, no tiene elasticidad y tiende a romperse por la edad.
Pero insisto, lo importante es que esté controlado por un profesional, que le prevenga controlando la presión, el colesterol que afecta la aorta, la diabetes que afecta las arterias, el cigarro es el enemigo número uno.
Y que tenga las veinticuatro horas una presión adecuada.
¿Qué es un pre infarto?
El termino pre infarto, es para que lo entienda la gente, en el lenguaje técnico, no existe.
El pre infarto es cuando tiene un dolor, que por determinada característica, puede haber determinado en un infarto.
A veces los dolores coronarios se dan cuando viene la persona caminando, llega un dolorcito y se le va. Ésos son dolores transitorios.
Si el dolor viene y se le mantiene, hay que consultar enseguida, porque si se mantiene, aún estando en reposo y por más de media hora, clínicamente es un infarto. Hay que estudiarlo.
La gente debe saber que un dolor puede darle y no le provocó infarto, en una duración de dos minutos, cinco minutos. Luego si se detiene le pasa.
¿Cuál es la diferencia entre un pre infarto y un infarto?
Un infarto ya es más grave, tiene riesgo de vida (pone la vida en riesgo).
En sus primeras cuatro horas, es mucho mayor el riesgo. Puede fallecer, aunque sea un infarto chiquitito.
Tiene que estar atendido en un CTI, monitorizado, brindándole todas las garantías de que ese enfermo está bien controlado, para no terminar en un paro cardíaco o una arritmia.
Luego de dos o tres días, se lo traslada a Montevideo, para tratar las coronarias con cateterismo, que es lo que deseamos lograr en Salto.
Si hubiese aquí un centro de estudios hemodinámicos, (cateterismo cardíaco), se resolvería rápidamente el problema. No contamos con ningún centro en el interior del país.
Se trata además de que la persona, cuente rápidamente con un CTI, para poder brindarle una sustancia, que retroceda el infarto.
Pero no es seguro como el cateterismo.
¿Qué es un cateterismo?
Entra un catéter por una arteria, va al corazón y es como una película a las coronarias, (arterias que irrigan al corazón y si se tapan, dan un infarto), estudiándolas.
Si existiera una obstrucción en una coronaria, en ese acto se puede resolver, colocando otro catéter, dilatando y dejándole un stent, (implemento que no permite que colapse nuevamente). Es probable que se evite el infarto si no lo tuvo y de lo contrario evita que se extienda.
¿Cuál es el papel de la obesidad en el terreno del corazón?
Es otro de los riesgos que lleva a presión alta, diabetes, porque dificulta al páncreas y el colesterol.
El sedentarismo lleva a la obesidad y que se descontrolen todos los factores de riesgo, entonces por ello hay que tener una vida activa.
Siempre y cuando la persona la pueda llevar a cabo.
¿Cuál es la forma más segura de tomarnos la presión?
La más segura es con un aparato a mercurio y bien calibrado, controlándolos todos los años.
Y los mejores lugares para controlarse la presión, son los centros asistenciales. Controlarla en la casa y cuando llega al centro asistencial, compararla.
Y no olviden que una dieta equilibrada (en lo posible sin sal) y buenos hábitos, es fundamental para cuidar nuestro corazón, conjuntamente con actividad física.
Es bien importante que la prevención sea a partir de la niñez, con un peso y una alimentación adecuada. Y tiene que tener un lugar fundamental, (no si le sobra tiempo) para realizar deporte.
Mary Olivera.
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