En evento sobre la equidad de género, se difundieron algunos materiales de mucho interés, para la información general.
Uno de ellos, que ha llegado a nuestras manos está referido al rol de Naciones Unidas y específicamente al actual período. Sobre el rol de la ONU, señala:
El 2 de Enero de 2007 asumió su cargo el actual Secretario General de las Naciones Unidas, el surcoreano Ban Ki Moon. Al hacerlo dijo que esperaba con su gestión “dar una esperanza a la gente más necesitada”.
Al iniciar el período de sesiones en curso de la Asamblea General – agrega – dijo que “trabajará ininterrumpidamente” por la paz en Dafur (Sudán) y en medio oriente.
Ban Ki Moon también ha insistido en la necesidad de reformar las Naciones Unidas para que estén “a la altura de los requerimientos del mundo actual” y para que “muchas promesas se vuelvan realidad”.
Con ese espíritu, mucha gente en todo el mundo estará trabajando dentro del Sistema para que este sea cada vez más abierto y sensible a las necesidades y urgencias de los pueblos.
Añade que “mucho se polemiza sobre si las Naciones Unidas son eficientes o no y sobre el alcance de sus acciones. Más allá de eso, algunas de sus acciones hablan tanto de su razón de ser y principios fundadores como de sus potencialidades para un mundo conflictivo:
– mantenimiento de la paz y seguridad por medio del despliegue de más de 50 fuerzas de mantenimiento de la paz y misiones de observadores.
– Disminución de la amenaza de guerra nuclear, inspeccionándose que el material nuclear se utilice para fines pacíficos.
– Prestación de ayuda humanitaria urgente a las víctimas de los conflictos armados.
– Limpieza de campos de minas antipersonales en antiguos campos de batalla tales como Afganistán, Angola, Camboya, El Salvador.
– Acciones de fortalecimiento de las democracias y de mejoras de la gestión parlamentaria en decenas de países.
Obviamente que estas acciones no significan que el aporte sea suficiente y la tarea esté acabada. A la prueba esta el resurgimiento de los conflictos en Africa y Medio Oriente, que responden a grandes cambios en esta parte del mundo.
Más allá de los resultados concretos, la ONU tiene un rol esencial en estas situaciones y sencillamente no debe dejar de cumplirlo, aún cuando haya disconformidad e impaciencia muchas veces.
Lo ideal es enemigo de lo bueno y por lo tanto, que haya mucho por hacer aún no quiere decir que no se haya hecho nada.