Es habitual que en una Academia el flujo de la sabiduría sea inagotable. Se conlleva tanto en el ayer como en el hoy en base de un respeto fundamental y si se quiere ya tradicional.
El Maestro Ricardo Villarreal con más de 30 años de historia en esta Escuela de Kung Fu estilo Lung Tao está al frente de todo. La Escuela está en nuestro medio, en calle Artigas 1755 y está afiliada a U.S.K.A (United State Karate Alliance) y está profundizada en las influencias del Kung Fu antiguo. Confirma su visita con un marco de centenares en títulos internacionales, sudamericanos y Champions.
Es indudable que la práctica hace al maestro y su objetivo comienza luego de un examen. Y fue el pasado fin de semana cuando Nicolás Richard contuvo la certeza demostrando actitud y firmeza a la hora de pasar de categoría.
Geraldine Acuña pasó a la categoría de cinturón verde. Fiorella Galliazzi a categoría cinturón Verde. Rodrigo Carballo a cinturón Verde. Bruno Ballacci, que en el último torneo obtuvo las medallas más altas y evidenció alto nivel en Kumite, logró ser y volverse en un prestigioso discípulo.
VOLVIENDO
AL PASADO.
Viajamos un poco al pasado, año 2700 antes de Cristo, llamado Kong Fou. La flexibilidad extraordinaria del ser humano ejecutaba la práctica a primera hora de la mañana y terminaba sus ejercicios con un baño y masaje. Más tarde sigue evolucionando este deporte por los demás pueblos primitivos hasta llegar al sistema organizado de la antigua Grecia dando como consecuencia, hombres perfectos en todas sus manifestaciones.
Salud es vida, la vida es agua y el agua fluye del Kung Fu.
