“Con el “Bomba” Cáceres tenemos una comunicación fluída y el tema del fútbol, siempre está arriba de la mesa. Y coincidimos en que la idea no falta de parte de quienes podemos tender determinadas manos para que el jugador juvenil pase a vislumbrar otro tipo de futuro, a partir de la chance de mostrarse en Montevideo.
Es cuando aparece la imposibilidad de una mayoría de clubes para sostener a ese jugador juvenil, desde el alojamiento a la alimentación.
Algunos van a Montevideo porque tienen la chance de un familiar que les abre la puerta. Pero no todos tienen esa chance. Es cierto que los que somos parte del Litoral Norte, nos condena la distancia. Aunque no se quiera creer no es fácil la ida o que de Montevideo vengan a vernos.
Corremos con desventaja respecto a departamentos próximos a la capital. O sea, aquí en el norte terminamos haciendo lo que podemos.
Lo que podemos no es siempre lo mejor, pero es lo que está a nuestro alcance. Hay jugadores que tienen una aptitud casi natural, pero también otros que necesitan un perfeccionamiento. No se si los técnicos realmente perfeccionen, sobre todo aquellos que tienen relación con planteles de Primera. Esa es la duda. O la gran duda”