back to top
7.2 C
Salto
jueves, julio 10, 2025
Columnas De Opinión
G-Irónico / Gonzalo Fernandez
G-Irónico / Gonzalo Fernandezhttps://ironiamagna.com
Gonzalo Fernández, "proyecto de escritor caminante", cuento con algunos trabajos independientes, y he participado como colaborador en la Revista Al Límite - Del Plata, y en la Revista Opción Médica. En mis diferentes alter egos suelo mutar a G-irónico y El Puntito de la J, dos personajes que buscan el humor irónico y negro de situaciones diarias y cotidianas.

Capibara Vs. Oso Perezoso

Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/f6ey

Estoy cansado de los capibaras. Sí, lo dije. Y lo repito con la lentitud meditada de quien no está buscando likes, sino dignidad.
No aguanto un meme más, un mate más, un carpincho con gorrito más.
Nos vendieron al capibara como símbolo de paz interior, pero es apenas otro esclavo del algoritmo, de la moda, del “mirá qué tierno soy mientras sostengo la decadencia del mundo”.

El capibara se ha convertido en un nuevo filtro: parece natural, pero está perfectamente diseñado para no incomodar a nadie. Es la mascota oficial del “estar bien aunque todo esté mal”.
Nos acostumbramos tanto a verlo en stickers, remeras, peluches y emojis que ya nadie se pregunta si representa algo real….y no, no lo hace.
El capibara es lo que pasa cuando el sistema te exige que te relajes… pero rápido. Que seas zen…pero no dejes de producir. Que flotes en el agua pero contestes el mensaje al segundo de recibirlo.

Y ya que estamos, ¿alguien me puede explicar por qué ahora todo el mundo dice “capibara”? ¿En qué momento abandonamos la gloriosa palabra “carpincho”, con su peso rural, su acento rioplatense, para adoptar esa versión edulcorada, importada y pasteurizada que suena a nombre de juguete japonés? ¡Capibara! ¡Por favor! Si en Uruguay siempre fue carpincho, carpincho debe seguir siendo. No podemos andar regalando nuestra identidad por un par de likes con filtro. ¡Rebeldía es decir carpincho en voz alta y con mate en mano!

- espacio publicitario -SOL - Calidez en compañía

¡Basta de roedores tibios: adoptemos al oso perezoso como estandarte nacional!

Yo elijo al oso perezoso. Un animal que no tiene redes sociales, ni agenda, ni “comunidad”. Un bicho que se mueve cuando quiere, si quiere, y si no, se queda colgado meditando sobre la inutilidad del movimiento.

El oso perezoso no quiere parecer tranquilo: es tranquilo. No necesita mostrarse simpático para que lo ames. No sonríe en fotos. No flota en piscinas. Simplemente existe, y con eso alcanza. 

Pensando en mi cumpleaños… con un año de anticipación (y con dignidad)

Así que este año, en vez de lamentarme porque nadie vino a mi cumpleaños, he tomado una decisión radical: empezar a organizar desde ahora el del 2026.

Transitando julio de 2025, quiero anunciar que mi próximo cumpleaños tendrá temática de oso perezoso. Y estoy avisando con tiempo. No porque espere una multitud, sino porque sé que a este ritmo de vida demencial, si no aviso ahora, las invitaciones llegarán el mismo día, a la hora exacta en que ya nadie tiene tiempo ni cabeza para nada.

Voy a preparar una fiesta con pausas, con espacio para bostezar sin culpa, para comer sin ansiedad, para no hablar si no hace falta. Una celebración sin reels, sin hashtags, sin globos con mensajes de autoaceptación vacía, sin historias y sin filtros.
Una fiesta donde si alguien llega tarde, es perfecto, y si no llega nadie, es coherente.

Ojalá que alguien lo recuerde.
Ojalá que alguien me salude.
Ojalá que alguien venga.
Pero si no, está bien.
El oso perezoso no espera nada. Y por eso nunca se decepciona.


Nos vemos en marzo del 2026. Si llegás tarde, no te preocupes. Capaz ni empezó.

Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/f6ey