Un móvil de la DNPC que realizaba controles en la ruta 3 avistó en las inmediaciones del kilómetro 489 una camioneta que circulaba en actitud sospechosa. Tras seguirla y alcanzarla se le ordenó que se detuviera. El chofer del vehículo hizo caso omiso y se dio a la fuga, por lo que empezó una persecución.
Con apoyo de un móvil de Investigaciones de la Jefatura de Policía de Salto se logró detenerlo en Avenida Manuel Oribe hacia el este. El vehículo era conducido por un hombre de 44 años, carente de antecedentes penales y de requisitoria.
Al inspeccionarlo se constató que transportaba 800 kilos de pechuga de pollo congelada, 540 botellas de refrescos de 200 y 600 ml, 168 botellas de caña de 910 y 800 ml, 288 sobres de café, seis botellas de energizante de 500 ml, todo de procedencia brasilera, cuyo valor total asciende a 217.210 pesos.

A su vez, la camioneta fue valuada en 202.500 pesos.
Puesto a disposición de la Justicia se condenó a P.J.C. “como autor penalmente responsable de reiterados delitos de contrabando a la pena de seis meses de prisión (…) sustituyéndose por libertad a prueba”.
A su vez se dispuso la confiscación de la mercadería, que quedó a disposición de Aduanas.