Al cabo de dos años de inactividad
La Unión Inmigrantes Salto pudo nuevamente festejar días pasados la tradicional “Fiesta del Inmigrante”, evento cultural, sin fines de lucro, abierto a todo público, gratuita, apolítica y laica” así lo reveló la Encargada de Relaciones Públicas y Prensa, Elizabeth Widmaier, quien agregó que “luego de dos años en espera, por los motivos públicamente conocidos, no queríamos aflojarle a la esperanza de un reencuentro.

Widmaier informó a EL PUEBLO que hace dos meses fueron convocados por la comisión organizadora. “Viendo que nos faltaban manos, compañeros que se enfermaron, nos envejecimos, nos entristecimos, con pocas reuniones y 22 años de trabajo en el medio, con muchas ganas y esperanzas, nos largamos a la edición de la 22ª. Fiesta del Inmigrante en gratitud por esos abuelos inmigrantes que hicieron grande este país. Sembraron una cepa de entrega, de trabajo y de solidaridad que una pandemia, así como las guerras que pasaron, no pudo aplacar”.
Por tal motivo la nueva edición de la Fiesta del Inmigrante pasó a llamarse “La Fiesta del Reencuentro”.
“Fue salir de un túnel para encontrar la luz con la alegría de los niños, las danzas, la música, la naturaleza, el Río Uruguay ( que tantas historias de inmigrantes alberga) , el aire libre, el compañerismo, el trabajo de equipo, la profesionalidad, el cariño, la diversidad, el respeto, la gratitud y la amistad.
El puerto es el lugar de partida y de llegada de muchas generaciones. Por barco, por avión, por tren…como fuera. Siguen siendo punto de encuentro.
Recreamos la idea de un Desembarco y buscamos elementos característicos de una época. Así muchas familias nos colaboraron con vestimenta, sombreros, chales, cochecitos de bebé, valijas, …elementos que trajeron esas primeras generaciones a Uruguay…y que logramos que pudiera ser un museo vivo e interactivo. Cada detalle tenía historia y vida propia, a través de la teatralización.
Nos recibieron los vecinos y las cachilas, joyitas que sus propietarios han conservado excelentemente y le dio un ambiente al puerto, que nos transportó a otra época. Aquella que vislumbraba un país emprendedor de puertas abiertas, con empuje, con garra, con solidaridad.
Esa alegría del reencuentro y el encuadre del entorno, nos dio una velada de 3 horas disfrutables, con familia, amigos, colaboradores, autoridades,……con ese respeto y amistad, que caracteriza éste evento socio cultural.
Las academias de danzas se mostraron muy agradecidas por el espacio. Hacía mucho tiempo que los alumnos no podían sus mostrar lo que aprendieron. Nerviosos pero felices. ¡Valió la pena!! Nos dimos cuenta, que para los niños 1 año ó 2, es mucho tiempo desconectados de la interacción persona a persona, que lo estimula y lo desarrolla en todos los ámbitos presenciales.
Lamentamos no haber podido acompañar más a las escuelas y liceos, en sus temas académicos con respecto a las inmigraciones del Uruguay y sus aportes.
A pesar de ello, el público presente fue muy interactivo con el escenario, y aplaudimos la idea de realizar un pequeño desfile de trajes típicos. Describiendo con humor y mucha alegría los trajes de las colectividades presentes (Alemania, España, Francia, Italia, País Vasco, Paraguay, Rusia, Rumania, Suiza, Líbano, Palestina), nuestras edades.
La Colectividad de Palestina, representada por el Sr. Ayeisch, nos deja un mensaje muy potente de Paz. Pensar en esa “PAZ” , trabajar para esa “PAZ”, es un legado invaluable, que rescata a cada ser humano para una vida integra y plena.
El cierre de Escenario lo hizo el grupo juvenil de danzas..Entre ellas se destaco el Hip Hop y todo un Popurrí de ritmos, representando a la Oficina de la Juventud.
Estamos muy agradecidos con la Intendencia de Salto por todo el apoyo recibido. Así como de Salto Grande, de la Prefectura, del Puerto y demás autoridades que se sumaron, para que esto saliera un éxito total.
A los comerciantes que nos apoyaron con buena onda en calle Uruguay al entregar el día anterior invitaciones para la convocatoria.
Va nuestro agradecimiento a la Casa Diocesana, quien nos brinda el espacio físico para sesionar desde nuestros comienzos.
Y un especial reconocimiento a la prensa, que también son parte de este equipo.
Fueron también colaboradores los integrantes de la comisión Uni Salto, personas muy mayores que se movieron con gestiones, trámites, festejando su cumpleaños con la familia y cortando el césped a las 9.00 de la mañana un domingo, para que a Salto no le falte ejemplo y cultura de trabajo en en equipo, trabajo comunitario.
Y es así que la Fiesta del Inmigrante pueda ser parte del legado y patrimonio de ésta ciudad.
Queremos seguir pasando la posta y que el monumento al inmigrante, sea un sueño hecho realidad. !Salto se lo merece! “ – concluyó Widmaier.