Caminar por las veredas de varias cuadras de calle Artigas, entre las Plazas Artigas y Treinta y Tres resulta bastante difícil para muchos. Hay un par de factores que inciden para ello, aunque uno más que el otro.
Excremento de perros diseminados por doquier, obligan a los peatones a andar prácticamente “a los saltos” para evitar llegar a algún lugar con ese aroma característico y desagradable que todos conocen. Pero también hay algunos tramos de veredas en mal estado.
Se nos aseguró por parte de quienes trabajan directamente en el tema que en dependencias de Omnibus de calle Gutiérrez Ruiz se encuentra un coche (de los automáticos) asentado sobre tacos, del cual se vienen sacando repuestos para atender los requerimientos de otras unidades.
Las estructuras metálicas de los semáforos que funcionan en calle Brasil han sido pintados de color negro. Se considera que con ello se logra distinguir mejor las luces de los mismos, teniendo en cuenta que varias no tienen el brillo necesario.
Ocurre casi siempre. Cada vez que se producen descargas eléctricas de alta intensidad, hay aparatos electrodomésticos que sufren las consecuencias. Las del pasado jueves, dejaron fuera de acción algunos televisores y computadoras.
Prácticamente resulta inevitable que en el correr de algunos días más el nivel del río Uruguay alcance guarismos que rozarán con la inundación. Ya estaba planteada la posibilidad, la que se vigorizó con las últimas lluvias.
