Un grupo de vecinos del barrio Progreso se unió para denunciar las agresiones físicas y el estado de abandono que sufren seis pequeños (el más chico de siete meses y el más grande de cinco años) por parte de su madre de 25 años.
Los denunciantes, que se presentaron en la seccional 2a, expresaron que los menores pasan todo el día en la calle, con los peligros que ello conlleva. Y como la progenitora trabaja por las noches como meretriz, sus vástagos quedan al cuidado de dos hombres -uno de ellos con retardo mental-, quienes serían tío y abuelo de los menores, respectivamente.
Los vecinos aseguran haber visto a los niños con serios hematomas, producto del maltrato al que son sometidos. Temiendo por su integridad, este grupo de personas decidió presentarse en la sede policial para poner en conocimiento del hecho a las autoridades competentes.
El Juez actuante resolvió que un policía comunitario concurra al domicilio en cuestión para verificar el estado de los menores, y que se realice un relevamiento con otros habitantes de la zona para corroborar la versión de los denunciantes.
DENUNCIA AGRESIONES CONTRA SU HERMANA
Una mujer denunció a su madre y a su padrastro por el maltrato “físico, verbal y psicológico” a los que someten a su hermana de 14 años, quien es hija de los indagados.
El denunciante asegura que la adolescente es agredida “a diario” por sus progenitores, quienes tienen por norma encerrarla durante largas horas en una de las piezas de la casa que comparten en el barrio Ceibal.
Tras el último “encierro”, el hermano de la víctima decidió dar parte a las autoridades policiales. El denunciante recibió un mensaje de texto de la joven afectada, que decía: “Mamá me pegó y me duele la nuca. Me encerró y estoy desesperada, porque no puedo seguir así”.
Anteriormente, el padre de la menor había sido denunciado por violencia doméstica por su concubina, disponiéndose una prohibición de acercamiento, relacionamiento y comunicación, pero antes de concluido el plazo de esta medida, la pareja ya estaba conviviendo nuevamente.
DEJÓ LA PUERTA
ABIERTA Y LE ROBARON
Una pareja dejó la puerta abierta de su vivienda tras ir de compras a un supermercado próximo a su domicilio, en el Cerro.
La tarea no insumió más de 15 minutos, pero ese corto lapso fue suficiente para que la casa fuera invadida por extraños, quienes se llevaron 60 dólares, 180 pesos argentinos, una tablet, un celular y una billetera con documentos.
El hombre de 51 años y su mujer de 43 realizaron la denuncia correspondiente en la seccional 5a, remarcando que la casa se encontraba sin llave en el momento del hurto.
INSÓLITA AGRESIÓN
Un hombre de 60 años domiciliado en el centro de la ciudad denunció que una persona le pegó “una trompada en el pómulo izquierdo” e intentó apuñalarlo “con un cuchillo”, por razones que desconoce. El incidente se registró el martes pasado cuando el denunciante escuchó a una mujer gritando que “un camión había chocado a su hijo” y por dicho motivo salió a ver qué pasaba, con las consecuencias reseñadas.
INCIDENTE EN UN POOL
A las tres de la madrugada del martes pasado, una pareja en estado de ebriedad concurrió a un local de pool en la calle Grito de Asencio esquina Barbieri para adquirir cigarrillos.
Una vez que consumaron la compra, salieron del establecimiento para tomar el litro de cerveza que llevaban consigo. Cuando el envase quedó vacío, procedieron a subirse a una moto roja para alejarse del lugar, pero la misma no arrancó, lo que ocasionó el enojo de los individuos. El hombre decidió retirarse a pie, al tiempo que su pareja siguió intentando prender el vehículo.
Minutos después de las 4.00, la mujer se bajó ofuscada del bi rodado y sin mediar palabra rompió tres vidrios del local de pool con el casco de su moto.
Instantes antes de que concurrieran los efectivos policiales al lugar del hecho, la agresora logró encender el vehículo para darse a la fuga.
Un grupo de vecinos del barrio Progreso se unió para denunciar las agresiones físicas y el estado de abandono que sufren seis pequeños (el más chico de siete meses y el más grande de cinco años) por parte de su madre de 25 años.
Los denunciantes, que se presentaron en la seccional 2a, expresaron que los menores pasan todo el día en la calle, con los peligros que ello conlleva. Y como la progenitora trabaja por las noches como meretriz, sus vástagos quedan al cuidado de dos hombres -uno de ellos con retardo mental-, quienes serían tío y abuelo de los menores, respectivamente.
Los vecinos aseguran haber visto a los niños con serios hematomas, producto del maltrato al que son sometidos. Temiendo por su integridad, este grupo de personas decidió presentarse en la sede policial para poner en conocimiento del hecho a las autoridades competentes.
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El Juez actuante resolvió que un policía comunitario concurra al domicilio en cuestión para verificar el estado de los menores, y que se realice un relevamiento con otros habitantes de la zona para corroborar la versión de los denunciantes.
DENUNCIA AGRESIONES CONTRA SU HERMANA
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Una mujer denunció a su madre y a su padrastro por el maltrato “físico, verbal y psicológico” a los que someten a su hermana de 14 años, quien es hija de los indagados.
El denunciante asegura que la adolescente es agredida “a diario” por sus progenitores, quienes tienen por norma encerrarla durante largas horas en una de las piezas de la casa que comparten en el barrio Ceibal.
Tras el último “encierro”, el hermano de la víctima decidió dar parte a las autoridades policiales. El denunciante recibió un mensaje de texto de la joven afectada, que decía: “Mamá me pegó y me duele la nuca. Me encerró y estoy desesperada, porque no puedo seguir así”.
Anteriormente, el padre de la menor había sido denunciado por violencia doméstica por su concubina, disponiéndose una prohibición de acercamiento, relacionamiento y comunicación, pero antes de concluido el plazo de esta medida, la pareja ya estaba conviviendo nuevamente.
DEJÓ LA PUERTA ABIERTA Y LE ROBARON
Una pareja dejó la puerta abierta de su vivienda tras ir de compras a un supermercado próximo a su domicilio, en el Cerro.
La tarea no insumió más de 15 minutos, pero ese corto lapso fue suficiente para que la casa fuera invadida por extraños, quienes se llevaron 60 dólares, 180 pesos argentinos, una tablet, un celular y una billetera con documentos.
El hombre de 51 años y su mujer de 43 realizaron la denuncia correspondiente en la seccional 5a, remarcando que la casa se encontraba sin llave en el momento del hurto.
INSÓLITA AGRESIÓN
Un hombre de 60 años domiciliado en el centro de la ciudad denunció que una persona le pegó “una trompada en el pómulo izquierdo” e intentó apuñalarlo “con un cuchillo”, por razones que desconoce. El incidente se registró el martes pasado cuando el denunciante escuchó a una mujer gritando que “un camión había chocado a su hijo” y por dicho motivo salió a ver qué pasaba, con las consecuencias reseñadas.
INCIDENTE EN UN POOL
A las tres de la madrugada del martes pasado, una pareja en estado de ebriedad concurrió a un local de pool en la calle Grito de Asencio esquina Barbieri para adquirir cigarrillos.
Una vez que consumaron la compra, salieron del establecimiento para tomar el litro de cerveza que llevaban consigo. Cuando el envase quedó vacío, procedieron a subirse a una moto roja para alejarse del lugar, pero la misma no arrancó, lo que ocasionó el enojo de los individuos. El hombre decidió retirarse a pie, al tiempo que su pareja siguió intentando prender el vehículo.
Minutos después de las 4.00, la mujer se bajó ofuscada del bi rodado y sin mediar palabra rompió tres vidrios del local de pool con el casco de su moto.
Instantes antes de que concurrieran los efectivos policiales al lugar del hecho, la agresora logró encender el vehículo para darse a la fuga.
