Así lo manifestó a EL PUEBLO Carlos Beasley, encargado del sector Turismo de la Intendencia de Salto, quien si bien admitió que se tenía otra expectativa, la misma no ha podido cumplirse porque la cantidad de turistas de nuestro país que han llegado hasta Salto se mantiene por debajo de los números de visitantes que llegaban a nuestras termas en la etapa pre pandémica. Si bien todavía queda una semana, tampoco se tiene mucha expectativa que los turistas argentinos logren llegar en gran número debido a la alta competitividad que existe en materia de turismo termal en el país vecino.
– ¿Qué evaluación se puede hacer desde la Intendencia de lo que vienen siendo estas vacaciones de julio en materia de turismo?
– Bueno, los números vienen por debajo de las expectativas. Había cifradas expectativas de una temporada de invierno un poco más alta, pero ya en los días previos se veía que iba a ser menor por los números de reservas, tanto en la órbita pública como en la privada. De cualquier manera, desde la Intendencia y los operadores (turísticos privados), se preparó y se montó una grilla de actividades bien completa como para esperar mayor cantidad de gente. De hecho, vino un poco más de gente de la que tenía reservas, cumpliendo con la nueva modalidad esta del turismo, que se sale sin reservas y se va llegando a los lugares sin tener reservaciones propias, sobre todo cuando las temporadas no son muy altas, y levantaron un poco los números.
De cualquier manera, tenemos que esperar a que empiecen a llegar los números de cada uno de los emprendimientos o de cada una de las asociaciones, que son quienes recaban los números y los pasan oficialmente a la Mesa, para ver cómo terminó en efecto. Hay comentarios de los operadores gastronómicos, sobre todo de que el nivel de gasto está muy bajo, y eso es debido a que esta ola de turismo de invierno es prácticamente todo turismo interno, y el turismo interno tiene menor nivel de gasto que cuando viene el turismo desde Brasil o de Argentina. Entonces, eso sí hace que estemos un poco por debajo de lo planificado en cuanto a los gastos en gastronomía.
Lo que sí podemos visualizar como algo positivo, es que ha tenido una buena aceptación las actividades y atractivos, porque eso se nota, la gente que anda en la calle, en la costa, en las actividades planificadas, estamos pensando en cabalgatas, en actividades culturales, han tenido buena recepción, pero en general un poco más bajo de lo previsto.
– ¿Se espera que puedan llegar algunos argentinos en esta segunda semana?
– Sí, aunque si bien hay poco nivel de reservas, hay algunas esperanzas cifradas en esto. La realidad nos dice también que los centros termales del otro lado del río, como habían quedado casi a la par nuestra en materia de precios, o incluso en algunos lados un poco más caros, están haciendo un esfuerzo en descuentos para retener a su turismo allá. Así que vamos a ver cómo impacta esto el número al final en las vacaciones argentinas. Te repito, no hay un buen nivel de reservas como era históricamente, no digo los últimos años, sino pre pandemia, que la gente ya había reservado con muchísimo tiempo sus alojamientos. Ahora es mucho más itinerante el turismo, no se quedan todos los días en el mismo lugar, así que tenemos que esperar un poco. Las esperanzas están cifradas en el nivel de gasto un poco más alto que puedan traer ellos.
– Este balance que usted realiza, ¿vale tanto para Termas del Daymán como para Termas del Arapey?
– Las realidades son un poco diferentes. La hotelería privada en Termas del Arapey, que es un nivel un poco más alto, tiene un público diferente al que no lo afectan las realidades económicas ni de un lado ni del otro del charco. Tienen un público muy importante argentino sobre todo y están un poquito por encima de los números del resto de la hotelería y del resto de los operadores. Así que los números ya son un poquito más altos que lo general y levantan un poco el promedio. Pero falta recabar esos datos, que los empiecen a aportar, aunque no siempre son datos que se vuelcan sobre la mesa, pero bueno, uno los rastrea de cualquier manera porque es importante tener los números para poder planificar para adelante.
– ¿Qué nos puede decir del sector camping en Termas del Arapey? ¿Hubo algún movimiento en esa área?
– No, el tema es que julio no es una época de camping en Termas del Arapey. Si bien hay algunas familias y algunos grupos que sí hacen camping, es muy menor. No tiene comparación con semana de turismo, mucho menos con carnaval, que ahí sí el camping se ve colmado. Hay algunos campamentos, hay algún movimiento, pero no es significativo a la hora de levantar los números. Estamos además en el cono sur americano con una ola de frío que recién amainó ayer de tardecita y hoy. Eso también hace que se retraigan un poco, sobre todo los campamentistas.