Según los datos oficiales, el 85 por ciento de los salteños no sale de vacaciones en verano hacia otro departamento y ayer el clima se hizo propicio para que cientos de personas concurrieran a refrescarse a las costas de nuestra ciudad, haciendo un alto en la tarea diaria, para aprovechar las bondades naturales de nuestro medio.
“Es muy lindo el nivel de gente que concurre” dice un guardavida
Playas del río Uruguay son uno de los lugares más elegidos por los salteños en este verano
Desde el 8 de diciembre del año pasado están habilitadas 4 playas en nuestra ciudad: Salto Chico, Las Cavas y Parque del Lago en el Río Uruguay, y las ubicadas en río Daymán, cerca de Termas. El horario de habilitación transcurre desde las 9 hasta las 21horas. Sumado al personal de Termas son más de 80 los guardavidas que trabajan en plena temporada y, según se nos dijo, “es muy lindo el nivel de gente que concurre, principalmente las familias”.
AYER BANDERA AMARILLA
“A las 13 horas arrancamos con bandera verde y a las 14:30 horas Salto Grande abrió las compuertas y tuvimos que colocar la bandera amarilla urgente. Las piedras se nos taparon en media hora y tuvimos que sacar el boyado porque se lo lleva la corriente”, nos dijeron Mateo Carvalho y Pedro Martínez, guardavidas en Salto Chico. Al decir de Jorge Castagnaro, director del departamento de Deportes de la Intendencia de Salto, es mucha menor la cantidad de agua que se “larga desde la Represa que otros años, y por eso la gente concurre de muy buena manera a las playas habilitadas”.
ENTRE LA PRUDENCIA Y LA RESPONSABILIDAD
La gente suele ser prudente a la hora de bañarse, aunque se puede observar todos los días una enorme cantidad de vehículos y personas de todas las edades “del Sarandí hacia el norte” zona que no está habilitada. Cada uno es responsable del lugar en el que se baña y de surgir alguna complicación en la zona no habilitada los guardavidas concurren de igual forma. Desde el comienzo de la temporada no ha habido complicaciones “más que la de alguno que haya quedado atrapado en las piedras y con el apoyo del gomón de Prefectura se lo ha rescatado”.
MÁS DE 80 GUARDAVIDAS
Consultado sobre el personal de guardavidas empleados en todas las playas, piscinas y en Termas indicó el director que “son más de 80, entre los 42 zafrales y los más de 40 permanentes”. Normalmente en las playas se refuerza la presencia del personal en horas de la tarde y en los fines de semana. Los turnos marcan dos guardavidas en la mañana y cuatro en la tarde. Todos están en el grado 5 del escalafón municipal. Las edades van desde los 18 años hasta los 50 años de uno que tiene ya 25 temporadas de zafral. Castagnaro estimó que “se tuvo que reforzar en la carga horaria y llegar en algunos casos a las 48 horas semanales, además del ingreso de los 40 chicos que hicieron las pruebas”. Admitió que la carga horaria no es la adecuada porque en algunos casos están trabajando más de 8 horas diarias.
El director constata que “también ha crecido la demanda de trabajo en las instituciones deportivas y muchas veces se lo forma en la Intendencia y luego se van a trabajar a otros lados”.
“Año a año las condiciones de trabajo se van mejorando” expresó Castagnaro, y entiende que en parte se debe a la creación de la “Unidad acuática que depende de Deportes. Otros años algunos guardavidas pertenecían a Turismo y la actual realidad facilita el mejoramiento de las condiciones de trabajo, en la medida que se pueda”.
NORMAS MÍNIMAS
Los animales no pueden bajar a la playa y eso se controla normalmente y se solicita que los pequeños animales circulen con correas. Tampoco pueden hacerlo los botes, aunque se pueden apreciar algunos que parten del Club Remeros. Los juegos en la playa y en el agua están permitidos: “solo no se puede ingresar con pelotas o elementos de flotación al agua cuando se verifica el llamado viento de costa, que permite el avance rápido de los elementos de juego”.
Los salteños disfrutan aunque sea en zona no habilitada.
Una visión del Ayuí.
Los niños se siguen arriesgando en las piedras de Salto Chico.