Por qué habría que invocar “la tensa hora final”?.
Por qué habría que invocar el tiempo de “ganar o morir?”.
Por qué habría que establecer “el dramático momento de las decisiones?”.
Al fin de cuentas, no es la final de un campeonato de fútbol?. No es un juego llamado fútbol, inserto en la sublime pasión del hincha?. Por qué entonces no apelar al entendido de “la disfrutable pulseada final?”.
Porque al cabo, es eso. Simplemente eso.
Juegan Nacional y Ferro Carril esta tarde-noche desde las 20.30’ en el Parque Dickinson. Uno de los dos será Campeón Salteño. Noventa minutos y en caso de empate, ejecución desde el punto penal.
Y es eso. Nada más que eso. Sin tensa hora final. Sin ganar o morir. Sin dramático momento de las decisiones.
Hay que derrotar los tremendismos.
Hay que derrotar la desmedida ebullición del “cara o cruz”, como si en un partido de fútbol se fuese la mismísima vida. Porque seguramente no faltarán quienes le endilguen al árbitro José Gabriel De Los Santos, más de un error, para atenuar el dictado de sus impotencias.
Entonces, que vayan anotándose los que se alistarán en la vereda de enfrente. Que el vencedor gane por mejor y el que el perdedor, exponga a los cuatro vientos la verdad de su hidalguía. Eso es impensado y utópico?.
EL MAL DE LAS AUSENCIAS
Nacional, con el 70 por ciento del plantel suspendido. Pero de última, lo incorporó a Julio Andrés Roldán. En el caso de Ferro Carril, sin Carlos Vera y Bruno Fiordelmondo. Los ausentes parecen jugar su propio partido, mientras que los adentro parecen ser de madera!. Cómo si no valieran!.
A Ferro le duele la ausencia de Vera, PERO FERRO NO ES VERA. Nacional CREE EN LOS QUE TIENE y no le falta derecho. Con Alejandro Galliazzi, Angel Pereira y el “Pájaro” Roldán, no es posible conciliar la senda de la progresión en los últimos metros, con la recompensa del gol incluido?.
LOS SUEÑOS ANDANTES
Desde la década de los 60, Ferro Carril no alcanza un terno. Sin tres torneos consecutivamente ganados. Ahora es la apuesta: 2007, 2008… y 2009?.
Es el sueño andante de Ferro, en un año donde alcanzó la condición de rey del Interior.
Nacional, es la consigna labrándose de tantos años a esta parte: ser Campeón Salteño. No lo es, desde aquel lejano 1958. Ahora es la apuesta: 2009!.
Es el sueño andante de Nacional.
Pregunta: influye la sicología de cada jugador?. La estabilidad emocional de Ferro Carril y el contraste de la duda de Nacional, en función de los antecedentes?. Y si Nacional, somete los antecedentes, para que nazca desde sus entrañas, el nuevo legado de su límpida convicción?.
Por lo demás: es necesario plantear un favorito, en el marco de una final que incluye a dos equipos que por algo llegaron y están de cara al reinado?.
El reinado… de quién?. De Nacional?. De Ferro Carril?.
Pero al margen “la tensa hora final”. O el “ganar o morir”. O “el dramático momento de las decisiones”. O en todo caso, hacerle la cruz a quienes trasladarán culpas, cuando la impotencia les cercene la ilusión….
-ELEAZAR JOSE SILVA-
Nacional y Ferro Carril en la disfrutable pulseada final ¿De quién es el reino?
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