El presidente dijo que su auto, un viejo Volkswagen Fusca de 1987, “dormirá en el galpón” mientras él viva.
El presidente José Mujica, dijo esta mañana en su audición radial de M24 que no venderá su Fusca celeste, luego de que el semanario Búsqueda informara el pasado jueves que había recibido varias ofertas por el viejo Volkswagen del año 1987.
Mujica recordó que tiene dos autos, uno de ellos “un poco desvencijado, guardado en el galpón y que no anda”, y el que están usando con su esposa, la senadora Lucía Topolansky, que se lo regalaron “un puñado de amigos”, que hicieron una “colecta”.
“Nunca lo podríamos vender porque ofenderíamos a esos amigos que se juntaron para hacernos ese obsequio. Naturalmente esos dos Fuscas van a vegetar en los viejos galpones, mientras estemos vivos y el porvenir dirá su destino”, expresó el mandatario.
“Trascendió un hecho verídico, una oferta que nos habían hecho. Hay amigos uruguayos que están reclamando en las redes que el Fusca no se vaya, yo no sé si algún día se va o no, lo que yo sé es que mientras yo viva, va a dormir en el galpón”, agregó. Dijo además que el vehículo solo saldrá de ahí para dar “alguna vueltita por el barrio”.
El presidente dijo que su auto, un viejo Volkswagen Fusca de 1987, “dormirá en el galpón” mientras él viva.
El presidente José Mujica, dijo esta mañana en su audición radial de M24 que no venderá su Fusca celeste, luego de que el semanario Búsqueda informara el pasado jueves que había recibido varias ofertas por el viejo Volkswagen del año 1987.
Mujica recordó que tiene dos autos, uno de ellos “un poco desvencijado, guardado en el galpón y que no anda”, y el que están usando con su esposa, la senadora Lucía Topolansky, que se lo regalaron “un puñado de amigos”, que hicieron una “colecta”.
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“Nunca lo podríamos vender porque ofenderíamos a esos amigos que se juntaron para hacernos ese obsequio. Naturalmente esos dos Fuscas van a vegetar en los viejos galpones, mientras estemos vivos y el porvenir dirá su destino”, expresó el mandatario.
“Trascendió un hecho verídico, una oferta que nos habían hecho. Hay amigos uruguayos que están reclamando en las redes que el Fusca no se vaya, yo no sé si algún día se va o no, lo que yo sé es que mientras yo viva, va a dormir en el galpón”, agregó. Dijo además que el vehículo solo saldrá de ahí para dar “alguna vueltita por el barrio”.
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