Cuando Gladiador afrontó uno de los últimos partidos en esta temporada, en primera fila a la hora de la mano tendida.
Se pone la camiseta y la traspira. El corazón, a veces sufre, pero se la banca. Porque MILTON ALBERNAZ, el presidente de Gladiador, sabe de qué se trata ese sentimiento de siempre. Por el barrio. Por su gente. Por esos colores. Pero con Milton, los objetivos se vuelven abrazadores. Bien de él. Bien a su manera. Bien desde la huella afectiva.
Y ocurre que más allá del deportista, el hombre mismo. El ser humano, desde ese milagro peregrinar por lo cotidiano. En el cada día. Y por eso, para Milton, un amigo de los afectos en esta casa de EL PUEBLO, ayer 25 de noviembre no fue un día más. Ni para él ni para Lucía.
El “Sí” en la boda ligó dos vidas, los latidos pasaron a compartirse aún más. Y entonces, descubrir la aurora del nuevo día…será distinto. Admitirá un sabor especial. Un sabor de nuevo tiempo…
Para quienes somos componentes del diario de los salteños, solo queda elevar la copa por el amigo de tantos años.
No es un brindis de ocasión… ¡es un brindis desde el corazón!
Hubo una vez alguien
que le formuló una
pregunta a otra persona.
¿Me acompañas?
-Esa otra persona, también preguntó: “A dónde?”.
No faltó la respuesta final: “A ser felices”.
Por Milton. Por Lucía. Y porque una historia de sentimientos… se puso a nacer.
-E.J.S-
